Más de seis meses después de que Granada iniciara una tregua que frenó las manifestaciones para reclamar el modelo de “dos hospitales completos” y diversas mejoras del sistema sanitario público de la Junta de Andalucía, la ciudad ha vuelto a la calle. Lo ha hecho en una manifestación multitudinaria, aunque inferior en número de personas a las que acudieron a las manifestaciones que tuvieron lugar durante el pasado curso político. En la de este domingo ha habido, según datos policiales, 25.000 personas por las cerca de 50.000 que llegaron a manifestarse hace ahora un año.
Organizada por la asociación 'Justicia por la Sanidad' con Jesús Candel 'Spiriman' como cabeza visible, la manifestación ha durado cerca de dos horas y media. Y ha comenzado sobre las 12 del mediodía frente a la sede de la Delegación de Salud, del único superviviente de todo el proceso sanitario, Higinio Almagro. Pues este delegado es el único alto cargo que continúa en su puesto de todos los que han pasado en los últimos meses por la sanidad pública de la Junta de Andalucía. Antes han desfilado dos gerentes del Servicio Andaluz de Salud (SAS), dos gerentes del Complejo Hospitalario de Granada e incluso el consejero de Salud. A efectos prácticos, la de este 15 de octubre, ha sido la primera reivindicación ciudadana contra las políticas de Marina Álvarez, desde que esta estrenó su puesto de consejera en esta cartera el pasado junio en sustitución de Aquilino Alonso tras la reestructuración del Gobierno andaluz.
La cita no se ha diferenciado en lo esencial de la casi decena de movilizaciones que hubo entre finales de 2016 y comienzos de 2017. Puesto que han vuelto a reclamar que se acabe con la fusión hospitalaria y que se recuperen los dos hospitales generales con los que ha contado Granada históricamente. Lo que sí que ha cambiado ha sido el apellido de la petición al añadirle el “ya”. Pues si antes se pedían “dos hospitales completos” ahora urgen porque los manifestantes recuerdan que la Junta ha incumplido el plazo previsto para trasladar los servicios de cada hospital. El plazo expiraba el pasado 1 octubre.
Por ello, los manifestantes han vuelto a dejar patente su rechazo a las políticas de la Junta de Andalucía personificando en la presidenta Susana Díaz a la que han vuelto a pedir que dimita. No en vano, recuerdan que en febrero se firmó un acuerdo para que la fusión de hospitales se anulara y se volviera al modelo de dos hospitales y que esto no solo no va camino de producirse porque el calendario de eventos se está retrasando sino que una nueva ley arroja dudas sobre ello. Se trata de la Ley de garantías y sostenibilidad del Sistema Sanitario Público de Andalucía que el PSOE pretende sacar adelante en los próximos meses con el apoyo de Ciudadanos. La misma, según denuncia Spiriman, privatiza la sanidad al mercantilizarla y en cualquier caso apuesta por un modelo de unificación de servicios que para los manifestantes es una nueva forma de denominar a la fusión hospitalaria.
No solo eso, también se ha pedido que se invierta más en sanidad pública y que dejen de desmantelarse ciertos servicios. Profesionales sanitarios de todos los ámbitos reclaman la dejadez y la falta de recursos para, por ejemplo, aminorar listas de espera. A su vez desde 'Granada por su Salud' se ha puesto especial énfasis en el hecho de que las obras del Hospital de Traumatología vayan a finalizar en diciembre y que sin embargo no abra hasta marzo. Un tiempo que consideran “excesivo” para el traslado de equipos.
Spiriman cada vez más aislado
Jesús Candel o Spiriman, el médico de urgencias que ha levantado el movimiento ciudadano del último año y medio, está cada vez más solo. No porque una mayoría social le siga apoyando, que de hecho sucede, pese a que en esta manifestación hayan ido menos personas que a las anteriores, sino porque su núcleo de trabajo se ha ido diluyendo en los últimos meses. El propio Spiriman ha asegurado a través de sus vídeos sentirse “decepcionado” -como calificativo más suave- con parte de quienes le apoyaron desde que empezaron las manifestaciones.
'Granada por su Salud', el colectivo que alberga a diferentes sindicatos, ciudadanos y partidos políticos, ya no está de su lado al menos de forma palmaria. Aunque siguen trabajando juntos, la actitud beligerante del médico ha provocado cierta división entre esta plataforma y el propio doctor. Candel ha llegado a arremeter contra 'Granada por su Salud' al entender que hay personas que pertenecen a ella que se mueven por intereses que nada tienen que ver con el bien común de la gente a la que dice defender.
Aunque en la manifestación de este domingo ha habido presencia de algún político, no ha sido notable como en otras ocasiones. Si en el pasado Podemos se mostró cercana al movimiento, ahora también parece estar algo más lejos de Spiriman. El propio médico ha cargado con dureza contra la formación morada a la que también acusa de utilizarle en su beneficio propio.
En este escenario, no cabe descartar que se vuelvan a producir más manifestaciones por la sanidad pública. Si hace medio año sucedían con cierta asiduidad, no hay razones que inviten a pensar que los manifestantes vayan a parar hasta conseguir lo que reclaman. No descartan volver a salir a la calle como tampoco lo hacían hace un año. La Junta de Andalucía se enfrenta de nuevo a la posibilidad de que la calle le vuelva a pedir insistentemente que cambie sus políticas. Granada ya lo ha hecho más de una vez. Nadie puede negar que lo vaya a seguir haciendo.