Una nube que puede poner en riesgo a los bomberos obliga a retirar a los efectivos que luchan contra el incendio de Sierra Bermeja

El Centro Operativo Regional del Infoca, el dispositivo contra los incendios forestales de la Junta de Andalucía, que está al mando de las maniobras de extinción del fuego de Sierra Bermeja, en Málaga, ha ordenado la retirada de gran parte de los efectivos de tierra por la presencia de un pirocúmulo en la zona del incendio.

Pero, ¿qué es un pirocúmulo? “La masa de aire cálida formada por vapor de agua y cenizas, y provocada por el incendio forestal, asciende de manera muy rápida, condensándose al encontrarse con un entorno más frío, dando lugar a una nube de humo que puede ir acompañada de aparato eléctrico aunque rara vez de lluvias”, explica el técnico ambientalista y divulgador meteorológico, dice Carlos Puentes Luque.

Estas nubes, muy parecidas a las que se producen en las erupciones volcánicas y “con forma de coliflor” puede ocasionar la creación de rayos y descargas eléctricas. Por ello, Luque entiende la decisión del Infoca de retirar a las 300 personas que componen el operativo terrestre de los 550 efectivos movilizados y que desde la noche del jueves trabajan para combatir el fuego.

5.000 hectáreas quemadas

El presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, ha avanzado que el número de hectáreas quemadas ya alcanza las 5.000. “Estamos en un momento crítico, muy complicado, muy difícil, en el incendio y por muchos recursos que pongamos, es muy difícil de extinguir”, ha dicho desde el Puesto de Mando Avanzado de Plan Infoca.

Moreno ha intentado explicar de “manera sencilla” que “el pirocúmulo es una pantalla en forma de borrasca que se puede derrumbar. Si es o es así es como si lloviera fuego en forma de pavesas (partecilla ligera que salta de una materia inflamada y acaba por convertirse en ceniza, según la RAE)”.

El presidente andaluz también ha remarcado que las autoridades permanecerán a “la espera” de ver cómo evoluciona este fenómeno que deriva de “las consecuencias del cambio climático, abandono de los campos y muchas otras consecuencias que están generando una nueva generación de incendios que los expertos dicen que no están preparados y no habían visto hasta ahora en estas latitudes”. El peor escenario es el “derrumbe de la nube”. De ser así, las cenizas podrían esparcirse por un radio que puede “duplicar y triplicar” la zona afectada.

El incendio forestal también ha provocado el confinamiento de los municipios de Jubrique y Genalguacil. La Policía Nacional ha pedido a la población que permanezca en sus casas y mantenga puertas y ventanas cerradas para impedir la entrada de humo. También ha recomendado evitar la circulación y ha informado que la carretera que une Estepona y Genalguacil, la MA-8301, se mantiene cortada desde el inicio de la vía.

Según los datos actualizados, la virulencia del incendio ha obligado al desalojo de más de 1.000 personas y se ha cobrado la vida de un bombero forestal de 44 años.

Las condiciones adversas siguen dificultando las labores de extinción del incendio “complejo” motivo por el que las autoridades ha declarado el nivel 2 del Plan de Emergencias ante Incendios Forestales de la Comunidad Autónoma.