Pedro Pacheco: “En Jerez me dicen que vuelva a la política y yo digo que sí, que por Navidad”
Pedro Pacheco recupera la sonrisa. El ex líder andalucista y alcalde de Jerez de la Frontera desde 1979 a 2003 se encuentra en libertad condicional desde el mes de mayo, después de permanecer tres años y medio en la prisión de Puerto III cumpliendo condena por el caso 'Asesores'. Tuvo que volver a sentarse en el banquillo por los casos 'Estación de Autobuses' y 'Casa del Rocío' y está pendiente de que el Tribunal Supremo admita el recurso presentado por su defensa contra la sentencia del 'caso de los Huertos de Ocio'.
Dice sentirse con la conciencia tranquila y con las manos “muy limpias”. Quiere recuperar el tiempo perdido e incluso no descarta su regreso a la actividad política, a pesar de que pesa sobre él una inhabilitación para el resto de su vida. Pero a sus 70 años recién cumplidos no renuncia a nada y, al tiempo que se prepara para participar en un maratón, sueña con ser concejal de su ciudad.
Acude a la entrevista pactada con este medio vestido informalmente y con la intención de ofrecer su verdad, su versión sobre la relación que ha mantenido con la Justicia.
¿Cómo se encuentra después de haber pasado tres años y medio en la cárcel?
Dicen que de chapa y pintura estoy bien, pero lo iremos viendo con el paso del tiempo. Poco a poco iré asumiendo lo mejor de lo que me ha pasado. Es un proceso natural.
¿Tiene la sensación de haber pagado con dureza lo que otros después no hicieron?
En aquella época confluyeron aspectos de una situación muy complicada. Salió el caso Gürtel o el de Jordi Pujol, y yo pasaba en el momento más inoportuno porque visto lo que se ha hecho hasta aquella época y lo que se ha venido haciendo después, lo mío del caso de los Asesores no deja de ser una anécdota, pero lo pagué yo.
Ahora en los ayuntamientos nadie quiere firmar nada...
Coincidiendo con lo mío ha habido una situación de mucha reserva por parte de los técnicos de asumir más allá de los riesgos necesarios y escrutar los informes. A veces eso ha paralizado la gestión. También la clase política es reacia a firmar y eso quien lo sufren son los usuarios.
“He estado preso por contratar a dos asesores”
Un exalcalde y una exalcaldesa de Jerez han pasado por la prisión. ¿Qué explicación tiene?
La gente cree que he estado preso por llevarme dinero, y yo no me he llevado nada. Hubo una época en la que entré yo y después lo hizo mi sucesora, pero lo mío fue por contratar a dos asesores de los miles que se han contratado en este país. Yo tengo las manos muy limpias.
Ahora está pendiente de que el Tribunal Supremo admita el recurso presentado por su defensa contra la sentencia de otro caso. ¿Cómo lo ve?
Curiosamente aparecieron las pruebas después de dictarse sentencia, qué casualidad. Eso puede permitir que el caso acabe en el recurso de revisión. Estamos preocupados, pero está sub judice y hay que esperar. Ojalá me devolvieran el tiempo pasado en la prisión. Espero que en mi interior esté todo tan bien como el aspecto exterior. A veces me vienen esos malos recuerdos y se pasa mal.
¿Puede caminar por Jerez con la cabeza alta?
Yo voy por Jerez tranquilamente y solo. Desde que conseguí el tercer grado penitenciario sólo he tenido un caso de un posible rechazo. Voy sin escolta y eso es para sentirse orgulloso. Y también me dicen que vuelva a la política y yo digo que sí, que por Navidad (risas).
¿El cuerpo le pide volver a la política?
Me gustaría culminar mi trayectoria política y me gustaría volver al Ayuntamiento como concejal, que es lo más bonito que hay. Todavía es un deseo.
Pesa una inhabilitación que lo impediría.
Yo pediría que me la quitaran ya porque considero que ya he pagado mucho por tan poco, que me den una cierta compensación. Habrá que pedirlo.
¿Cómo fue el trato recibido en prisión?
Me han tratado muy mal y no sé por qué. Fue así por orden expresa del señor director, lo que provocaba extrañeza en los miembros de la seguridad. Los servicios de seguridad son bastante buenos y los servicios técnicos algo menos buenos, pero en general me han tratado así por el director.
¿En qué consistía ese mal trato?
Por ejemplo las continuas revisiones que me hacían de la celda, con todo patas arribas en el suelo y apertura de expediente disciplinario. Eso era mala conducta y te dificultaba la obtención de los permisos de salida.
¿Prestaba ayuda a otros reclusos?
Yo me he hinchado a trabajar por la gente y no me arrepiento. Ayudaba jurídicamente y no sólo en los temas penitenciarios, sino también en cosas personales de hipotecas. Era un servicio gratuito y todas las personas se han portado de un modo exquisito. Yo pagaba el café e incluso los folios.
Alguna vez se ha quejado de agravios comparativos como el de la familia Pujol. ¿Qué cambiaría ahora del sistema penitenciario si pudiera volver a ocupar un cargo político?
Este país... qué quiere que le diga de las distintas varas de medir. Lo que aprieta la política, los partidos... Me habla del caso de Pujol, pero cuántos hay con un trato desigual. En eldiario.es leí una encuesta de la desconfianza de los ciudadanos hacia la Justicia. Los responsables deben tomar cartas en el asunto. Sí digo que lo de endurecer las leyes sobra, porque el Código Penal actual es el más duro de Europa, más no lo hay. Provocó en Europa cierta estupefacción y es más duro que el de otros países que se han incorporado más tarde a la Unión Europea, y no se corresponde con el índice de población penitenciaria de personal en las prisiones. La gente pide más dureza sin ton ni son. Se está formando un populismo punitivo a raíz de casos que se airean en la opinión pública. Lo que hay que intentar es saber el motivo por el que la gente transgrede las leyes. El sistema norteamericano consistía en encerrar a un individuo y tirar la llave a la cloaca y ahora han descubierto que eso no es, que hay que rehabilitarlo para que vuelva a la sociedad. Hay que tener más medios para reinsertarlo con garantías.
“Hay gente que pide la ley del Talión”
¿Ha notado un populismo muy extremista desde su salida?
Sí. Hay gente que pide la ley del Talión, que era algo propio de las sociedades primitivas. Ya tenemos leyes muy duras y no se pueden endurecer más.
¿Y qué opina del desprestigio de los políticos?
Yo no estoy en activo ahora, pero desde fuera veo que hay muy poca preparación. Nosotros cuando empezamos veníamos de una dictadura y veníamos de las facultades. Ahora hay una preparación regular y no se toman a pecho el tema público. Nosotros estábamos trabajando noche y día, hasta los fines de semana. Eso ahora no lo hacen ni muertos. Hay un relax sobre lo que debe ser el interés público. Y Jerez ha cogido una cuesta abajo muy preocupante y eso hay que cortarlo cuanto antes. Jerez necesita recuperar su hegemonía en el sistema de ciudades, recobrar un plan estratégico con unos objetivos claros. Tiene un nombre y unos servicios muy buenos y no puede ir a la deriva.
Se le acusa de haber sumido a la ciudad en un endeudamiento del que no se recupera...
Yo lo dejé en el 2004 y sin percibir subvenciones de las motos porque nos negaron el pan y la sal y lo dejé con 200 millones de deuda y ahora van camino de 1.000 y han vendido el agua. Que diga la derecha dónde está el dinero del agua. La transformación que tuvo la ciudad del 79 al 2003 fue por el coraje que le echaron los jerezanos, todo fue un pulso nuestro y soportando duras reconversiones del sector vitivinícola, la crisis de Rumasa, la incorporación al mercado común europeo... No tiene justificación el índice de la deuda de hoy.
¿De haber pertenecido a un gran partido nacional el trato habría sido otro en todos los sentidos?
Yo siempre decía que en Andalucía, que no fuera del PSOE, sólo estábamos Julio Anguita en Córdoba y yo en Jerez. Y todo se consiguió con mucho esfuerzo. Si se piden estadísticas de esos años, las subvenciones no llegaban ni de la Junta ni de la Diputación. Con lo mucho que ha aportado Jerez al Estado, el Estado no lo ha devuelto. Los comportamientos hacia nosotros no eran los adecuados.
¿Le duele ver el mal momento del andalucismo?
Me duele verlo, pero me está animando ver que está renaciendo Izquierda Andalucista, donde al parecer hay miembros que militaron en los partidos andalucistas. Es la señal de que sigue siendo necesario en Andalucía un partido andalucista. La única forma de darle contenido a la autonomía andaluza que no sea sólo una mera descentralización administrativa es la presencia de un partido serio.
“La Constitución española está sobrepasada”
En Catalunya han pasado muchas cosas durante el tiempo que ha estado en prisión.
Es un problema fruto de estupideces y de una inactividad desde Rajoy, que ha estado cuatro años como Don Tancredo, que sólo se ha movido para mandar a la policía y a los fiscales. La otra parte tampoco se ha portado bien y ha faltado diálogo. Hay que analizar el problema de si la España autonómica no es una España federal. Yo creo que sí lo es. Cuanto más tiempo pase será peor. El tema de Catalunya es que tiene que conseguir el mismo trato discriminatorio que el País Vasco y Navarra, al que me he opuesto siempre. Pero la economía catalana es el 20% del PIB español. Si la solución es darle más pelas para que se equipare al País Vasco y Navarra, eso es imposible. No es malo modificar la Constitución. Alemania lo ha hecho 120 veces y no pasa nada. La Constitución española está sobrepasada en muchas cosas y hay que actualizarla.
¿Es el escenario actual en España el adecuado para ello?
Es que si nos ponemos así nunca habrá un escenario ideal. Es mejor modificarla, como definir las competencias del territorio federado y del territorio central. En la financiación ver cuáles son los principios de una forma clara. España no está descrita de un modo claro por presión de nacionalistas vascos y catalanes y hay que hacer cosas sobre los derechos sucesorios, etc.
¿Qué ha sentido con la fallida investidura de Pedro Sánchez?
Tanto él como Pablo Iglesias tendrían que haber dimitido los dos por incompetentes. Dos políticos que no son capaces de llevar a cabo lo que dicen los electores por sus egos y por otras cosas, no sé de qué regeneración estamos hablando. Hay que empezar por uno mismo. Se ha demostrado que son ineficientes y eso está en contra de los principios de la regeneración democrática.
¿No cree en la regeneración política ni en la nueva política?
Son palabras vacías, es todo mentira. Palabras muy bonitas pero vacías. Las cosas que se dicen hay que hacerlas. Los nuevos partidos llegaron para quedarse y si el PSOE y el PP juegan a esto, se equivocan.
¿Ya no es lo mismo ser de derechas o de izquierdas como cuando empezó en la política?
Era una distinta época. A eso hay que darle contenido y no se hace. Ves comportamientos de un partido de derechas que son más avanzados que los de un partido de izquierdas y ves comportamientos de un partido de izquierdas que son más conservadores que los de un partido de derechas. Eso es un reflejo de la sociedad. Los partidos son lo que dicen los electores que sean.
Entonces la irrupción de Vox responde a...
Es lo que hay en la sociedad y era raro que no hubiera un partido que lo asumiera. Estaba dentro del PP porque la mayoría proceden de ahí y por lo menos ya han dado la cara. Han sido coherentes dando por fin la cara.
¿Qué lectura hace de las últimas elecciones autonómicas en Andalucía?
El Gobierno de la señora Susana Díaz patinó. Perdieron muchos votos y el bajón lo han aprovechado las tres derechas. En Jerez los partidos que han sacado concejales deben plantearse el nivel de abstención, que es muy preocupante. En las locales prima la proximidad del político y el representado. Hay que hacer algo para animar a la gente porque la cosa no va bien.
¿Se está perdiendo el político con carisma?
Nosotros pillamos una época distinta y había muchos políticos con carisma. Aquí en Jerez hay una losa de iconos que está pesando sobre la ciudad.
Y ahora el Gobierno local de Jerez se sube los sueldos.
Es una metedura de pata sin precedentes. Las cosas hay que hacerlas bien. Un político debe estar recompensado, pero hay que hacerlo bien explicado. A los buenos profesionales no les compensa dejar su mundo privado para ir a lo público, cada vez habrá menos que lo hagan.
El derribo del chalet de Bertín Osborne originó su frase más famosa. ¿Qué le parece que ahora esté triunfando en televisión?
En este país se está llenando de iconos, como los componentes de algunas tertulias donde se practican el delirium punitivo. Es una sociedad democrática y hay que acostumbrarse a eso. Bertín Osborne no fue el culpable, sino un familiar suyo. También coincidió que se derribaron casas ilegales de gente humilde y sí se paralizó la de él, que tenía un apellido muy ilustrativo de esta zona.