Pedro Sánchez refuerza las acusaciones de bloqueo de C’s y Podemos a la investidura de Díaz
Pedro Sánchez ha aterrizado en la campaña electoral andaluza con un respaldo firme a Susana Díaz como presidenta de la Junta de Andalucía. Después de pasar por Granada, el secretario general del PSOE acusó a Podemos y Ciudadanos de “practicar seguidismo del PP” que lo que provoca “el bloqueo y dejar sin gobierno a Andalucía”. Lo ha dicho en Jaén donde ha participado en el acto de presentación de la candidatura socialista a la capital.
Según Sánchez esta es la táctica del “Partido Popular de siempre” que “con tal de que no gobierne el Partido Socialista, deja sin gobierno a Andalucía”. Así ha reforzado el discurso que la presidenta en funciones viene esgrimiendo en la tensa negociación para la investidura que este jueves vive un nuevo episodio. Sánchez ha insistido en que la “nueva politica” no puede ser “la vieja política de siempre”, que ha identificado con la estrategia del PP en Andalucía. Por eso les ha pedido el respaldo para Díaz como prueba de ese nuevo modelo político.
Aunque ha pedido el voto para los candidatos socialistas a las municipales, las claves en el discurso de Sánchez han mirado directamente a noviembre. Ante un auditorio repleto y entregado, el líder socialista ha señalado al PSOE como “el partido del pacto entre generaciones”. Algo que le ha permitido, a la vez que atacar el discurso de Albert Rivera sobre el relevo generacional en la política, sacar a colación los frentes abiertos por la crisis y las políticas de austeridad: recortes en pensiones, educación y sanidad; emigración juvenil por falta de empleo; o la eliminación de políticas de igualdad.
Entre sus propuestas un “plan de repatriación” para que vuelvan los jóvenes que han tenido que emigrar por falta de alternativas laborales y una “ley de igualdad salarial”. Los aplausos, en un auditorio joven y feminizado han llegado enseguida. Sánchez ha encontrado afirmación de un público que ha dado por buena la espera –ha llegado con casi una hora de retraso- para abrazar, besar y obtener el inevitable ‘selfie’ con el secretario general del partido.
A diferencia de lo que es habitual en este tipo de actos, tras una brevísima presentación, Pedro Sánchez ha abierto el turno de intervenciones. Coincidiendo con el arranque de buena parte de los informativos vespertinos de radios. En su discurso ha habido alusiones al candidato a las municipales, Manuel Fernández; también a la presidenta del PSOE, Micaela Navarro, presente en el acto. La ha erigido como ejemplo de mujer que se enfrenta a las políticas de “un gobierno hostil” con las mujeres, refiriéndose a Rajoy.
En el tono del buen conocedor de un partido del que aspira a obtener el apoyo en las primarias, ha saludado a la “agrupación de juventudes más joven y numerosa” de España. Un acto lleno de guiños y complicidades. Sánchez con Díaz, con la que tampoco coincidirá mañana en ningún acto. De Sánchez con Manolo Fernández, del que ha dicho que “lo mejor para Jaén” llegará con él. Y del candidato con todos los miembros de su lista y, sobre todo, de los socialistas jiennenses entre sí.
Uno de los nombres más repetidos ha sido “Carmen”, en alusiones a la última alcaldesa socialista de Jaén, Carmen Peñalver. Las heridas abiertas entre las ejecutivas local y provincial, tras el hundimiento en las municipales de 2011, parecen haberse restañado. Aunque Peñalver estuvo acompañada por ‘su candidato’, Miguel Sola, el hombre que intentó concurrir como alternativa a Manuel Fernández en las primarias pero no logró los avales necesarios.
Muestras de afecto para encarar la recta final de las municipales. De todos, Pedro Sánchez fue el que más ha acaparado. No solo en las frases emotivas de los discursos. En realidad las intervenciones han sido solo un paréntesis de palabras para justificar los pasillos, uno de ida y otro de vuelta, de decenas militantes/simpatizantes que buscaban el contacto con el líder como si fuera una emergente estrella del pop.
