La disputa por el Ayuntamiento en Podemos Zaragoza
Dos listas, dos alternativas. Con más desemejanzas que similitudes. Entre el 1 y el 5 de febrero, los inscritos en Podemos votarán en las primarias del partido en Zaragoza. Violeta Barba encabeza la candidatura “Zaragoza es más” y Pilar Vaquero es la número uno de “Podemos en Común”.
Los resultados se conocerán entre el 6 y el 7 de febrero. A partir de ahí, se abren varias opciones para lograr el encaje dentro de la confluencia. El mecanismo para pergeñar la lista definitiva que confluirá a los comicios municipales del 26 de mayo, la posición respecto al PSOE, e, incluso, el nombre que aparecerá en las papeletas son elementos discordante entre ambas candidaturas.
¿De dónde vienen?
La candidatura de Violeta Barba es la que representa al aparato en Aragón (aunque alineada con el sector crítico a escala estatal). A la actual presidenta de las Cortes de la comunidad la acompañan la diputada autonómica Amparo Bella; el concejal de Economía y Cultura del Ayuntamiento de Zaragoza, Fernando Rivarés; el jefe de gabinete de Alcaldía en el Consistorio zaragozano, Iván Andrés, o el diputado en el Congreso Pedro Arrojo. Tienen, además, el apoyo del secretario general del partido en Aragón, Nacho Escartín, y de la candidata a la Presidencia del Ejecutivo autonómico, Maru Díaz. Por nombres (y por posicionamiento en algunos aspectos) supone la extrapolación de la lista encabezada por Díaz en las primarias autonómicas.
Del mismo modo, en la alternativa encabezada por Pilar Vaquero residen buena parte de las personas y las ideas que impulsaron la de Erika Sanz (que apoya esta candidatura). La número dos es Esther Moreno y, cerrando la lista, están los diputados autonómicos Itxaso Cabrera y Román Sierra (que formaron parte de la candidatura de Sanz).
La lista de Barba se nutre (en sus primeros puestos) de personas que ya acreditan una experiencia en la política (entendiendo esta como el hecho de haber ocupado cargos en instituciones). Es esa una de las diferencias, ya que este bagaje institucional deriva en un ideario distinto, por ejemplo, respecto a la posición que se debe tener respecto al PSOE.
Zaragoza en Común
En conversaciones con eldiario.es, la propia Barba apuntaba que la otra candidatura había nacido “de manera reactiva” a la suya, “como una oposición”. En su presentación, Vaquero señaló que uno de los motivos que la habían llevado a presentarse era “la deriva” de Podemos respecto al proyecto de Zaragoza en Común (ZeC).
Aunque las críticas públicas prácticamente no han existido, fuentes del aparato en Aragón (representado en la lista de Barba) muestran su contrariedad con la gestión realizada por ZeC en momentos puntuales. Estas discrepancias no aparecen en la candidatura de Vaquero, que defiende con firmeza la labor de los comunes en el Ayuntamiento durante esta legislatura.
Pedro Santisteve
Días antes de la presentación oficial de su candidatura, Pilar Vaquero, en diálogo con este medio, afirmaba con rotundidad que el encaje de las listas debería ser fruto de unas primarias abiertas. Lo volvió a repetir en el acto de puesta de largo, pero dejando la puerta abierta a la opción de blindar a Santisteve para que este ocupe el número uno sin pasar por esas urnas internas. Propuesta que también había verbalizado Escartín en días anteriores.
Porque, más allá de los desacuerdos, Escartín ha repetido en varias ocasiones que Santisteve es “el mejor alcalde de la historia de Zaragoza” y Barba se ha expresado en términos muy similares. Por eso apuestan porque repita el alcalde, eximiéndole de participar en las primarias o pactando directamente la lista sin comicios, y haciendo que Barba sea la número dos. Esta es, además, la posibilidad que más agradaría a la dirección estatal (demasiado enfrascada en otros asuntos en los últimos tiempos).
Posición frente al PSOE
Coinciden ambas candidatas (hablando con eldiario.es) en que el PSOE municipal presenta muchas más sombras que luces en los últimos tiempos. También en expresar su confianza (más en el caso de Barba que de Vaquero) en que Pilar Alegría pueda airear y oxigenar a la formación en el Ayuntamiento. Tampoco discrepan en afirmar de manera tajante que sumarán con los socialistas si, llegado el momento de la aritmética, su adición evitara un gobierno de derechas. Las similitudes se acaban ahí.
La posición de ambas candidaturas en este caso sirve para realizar otra extrapolación con las primarias autonómicas, cuando Maru Díaz expresó abiertamente que, dada la oportunidad, había que entrar en Gobierno con el PSOE y Erika Sanz desdeñó de pleno esa opción.
Dice Barba que, tras cuatro años con los socialistas en las Cortes de Aragón, han comprendido que es más difícil llevar a cabo políticas de cambio desde la oposición. Asegura Vaquero que “sí”, que en esto sí se puede establecer un evidente paralelismo entre su opinión y la que expresó Sanz hace unos meses.
El nombre
En la denominación que debe aparecer en las papeletas también la postura es disímil. Escartín señaló hace unas semanas que el nombre de Podemos, sí o sí, debería aparecer en las papeletas: en 2015 no fue así “y perdimos entre uno y dos concejales”, aseguró.
Vaquero solo tiene claro que el nombre debe ser Zaragoza en Común, que esa es la marca válida. Sobre si también se tiene que reflejar el de Podemos, afirma que no le molestaría, aunque sin verlo, ni mucho menos, como una necesidad.
