PP y PSOE no rechazan el acuerdo de la UE con Turquía en la Diputación de Zaragoza

El último Pleno celebrado en la Diputación de Zaragoza (DPZ) vio como PP y PSOE se unían para tumbar una propuesta del Grupo En Común que, fundamentalmente, pretendía rechazar el acuerdo de la UE con Turquía en el tema de los refugiados. Francisco Compes, portavoz del Grupo Socialista, ha asegurado a eldiario.es que están “al máximo con los refugiados”, pero que decidieron votar en contra porque la proposición tenía una “gran carga política”.

Compes explica que propusieron a En Común redactar un articulado conjunto y que estos “dijeron que querían que se aprobara el suyo”. Un texto que, según el portavoz, estaba “muy politizado y cogía cosas que tanto Ada Colau como Izquierda Unida habían hecho en otros lugares”.

Sostiene que se debería haber aprobado un texto “aséptico”, como el que salió de las Cortes de Aragón, pero que como el Grupo En Común “no estaba por la labor” decidieron votar en contra para que en futuras ocasiones “se avengan a negociar”.

Tanto Compes como el resto de representantes de los partidos que votaron en contra o se abstuvieron (PP y PAR) mostraron, al menos con la palabra, su rotundo apoyo a los refugiados.

A principios del mes de abril, en la Diputación de Huesca, sí salió adelante una propuesta que, como esta, tenía como objetivo basilar rechazar el pacto entre la UE y Turquía. En esa ocasión, PSOE, PAR y Cambiar Huesca votaron a favor y solo el PP se abstuvo.

¿Qué decía el texto?

En el texto propuesto por el Grupo En Común se proponía, entre otras cosas, que los municipios de la provincia formaran parte de la red de ciudades refugio; que la DPZ instara a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) a desarrollar la iniciativa ‘Un municipio, una familia acogida’, y que la institución se comprometiera a no conceder ayudas humanitarias de emergencia a proyectos que participen en el proceso de la deportación de personas refugiadas a Turquía.

La exposición de motivos establecía que, a pesar de que el acuerdo sufrió diversas modificaciones, persistían en él unas “tremendas violaciones de los derechos internacionales de las personas”. Existen serias dudas, decían, de que el pacto “cumpla con el Derecho Internacional –como el derecho de asilo-”.