Denuncian “dejadez y abandono” en el cuidado de un joven que murió en una comisaría de Zaragoza
El pasado 6 de abril, Miguel Ángel F. F., de 33 años, falleció en la Comisaría del Actur de la Policía Nacional de Zaragoza. La versión oficial, según fuentes policiales, es que lo hizo por “causas naturales”; además, apuntan las mismas fuentes, la autopsia no rebela signos de violencia. En la familia tienen dudas y, por eso, han decidido presentar una denuncia. Lo hacen con el apoyo de la Asociación Libre de Abogados de Zaragoza (ALAZ), que se personará como acusación popular.
El detenido, que pereció un miércoles, se encontraba en los calabozos desde el lunes anterior. Derechos Civiles 15M Zaragoza, que está en contacto con la familia y es quien ha hecho pública la información, señala que, como mínimo, “ha existido dejadez y abandono por parte de la Policía Nacional de la Comisaría, en su obligación de responsabilizarse de la salud de las personas detenidas y que están bajo su cuidado”.
El relato oficial, dicen, genera muchas dudas en cuanto “al trato real recibido”. Explican desde esta organización que, durante la detención, “el fallecido fue trasladado a distintos centros hospitalarios, sin saber las causas ni el tratamiento recibido”. La propia versión oficial, continúan, “habla de muchas horas de detención, cuando podría haber sido trasladado al Juzgado mucho antes”.
Según el Grupo de Derechos Civiles, se puede tratar de un caso “abuso policial” y, por ello, advierten de que llevarán “un seguimiento detallado del caso para exigir que se haga justicia”.
También hacen referencia a las informaciones aparecidas en otros medios, en los que se repasaba el “historial delictivo” del fallecido. La vida anterior de esta persona, esgrimen, “no justifica ningún maltrato por parte de la Policía, ni mucho menos dejarlo morir sin la atención necesaria”.