Terapia ocupacional: un manual de magia terapéutica aragonés, pionero en España

Gomas, cuerdas, dados o papel son algunos elementos esenciales con los que los magos han hecho su magia a lo largo de la historia. Pero desde hace unas décadas, la magia no solo entretiene y hace soñar, sino que también cura. En Estados Unidos, el mago Kevin Spencer trabaja desde hace más de 20 años en la aplicación de trucos de magia en rehabilitación psicosocial y física. Al comienzo de su carrera, este mago tuvo un importante accidente de coche, y durante el proceso de rehabilitación se dio cuenta de que practicar los trucos de magia que sabía, le ayudaba a avanzar en su recuperación. Desde entonces, Spencer se ha convertido en una de las principales autoridades en el uso terapéutico de trucos de magia en entornos académicos y clínicos.

El ilusionismo es una actividad con un importante potencial terapéutico porque permite trabajar las dificultades de forma reflexiva e individual, pero también desde una perspectiva más general y enfocada al ámbito social. Los beneficios de la magia como terapia son múltiples, y desde hace tiempo se emplea de forma habitual para disminuir el estrés de la rutina diaria, estimular la inteligencia y la imaginación, adquirir confianza en uno mismo y ejercitar la psicomotricidad, entre otras.

Conscientes de estos beneficios, el Colegio Profesional de Terapeutas Ocupacionales de Aragón (COPTOA) ha querido dar un paso más allá, y democratizar este conocimiento para ponerlo a disposición de otros profesionales, pero también de usuarios y familias, a través de la edición del libro “La magia como una herramienta para la terapia ocupacional”. Se trata de proyecto conjunto de COPTOA con la Sociedad Aragonesa de Ilusionismo. Juntos han editado esta guía que, a modo de manual, recoge las intenciones el proyecto, las recomendaciones científicas de los ejercicios, y fotografías con descripciones para poder realizar de manera correcta cada juego mágico.

Una iniciativa aragonesa pionera en España

La magia ya se emplea como una herramienta más en terapia en algunos puntos de España, pero esta es la primera vez que magos y terapeutas ocupacionales se unen para sacar adelante una publicación pautada. “Nos hemos basado en proyectos similares que había ya en Estados Unidos, Canadá, Inglaterra, México, Argentina, pero aquí en España no había nada parecido”, explica Javier Ferrer, vicepresidente de la Sociedad Aragonesa de Ilusionismo.

Ambas entidades han colaborado para compilar una serie de trucos de magia, compuestos por “ejercicios sencillos, que no simples”, apunta Ferrer, supervisados y en todo momento por terapeutas que orientaban sobre qué músculos movilizar o cómo podrían aplicarse en terapia esos juegos de magia para el beneficio terapéutico. “Son juegos sencillos que van aumentando su dificultad conforme mejora la destreza del paciente”, añade el vicepresidente de la Sociedad Aragonesa de Ilusionismo. Como explica Marta Marín, presidenta de COPTOA, los terapeutas emplean la ocupación para que las personas puedan rehabilitarse “volver a cocinar, ponerse los zapatos o volver a trabajar”. Por ejemplo, “en lugar de utilizar los cordones del zapato y repetir y repetir, hacemos un juego de magia que sean los mismos movimientos que esa persona vaya a utilizar para atarse el cordón”, explica la presidenta de COPTOA.

El libro “La magia como una herramienta para la terapia ocupacional”, está dirigido a niños y mayores de todas las edades, personas con problemas de enfermedad mental, o “personas con problemas de autoestima que salgan ante el público y que superen sus miedos y luego puedan enfrentarse, por ejemplo, a una entrevista de trabajo en su vida cotidiana”, apunta Marta Marín. En este sentido, el libro también cuenta la experiencia de personas que ya han pasado por esta iniciativa, “por ejemplo, en Navarra donde se aplica en salud mental, o en La Rioja donde se trabaja en la tercera edad”, recuerda Marta Marín.

La experiencia está siendo tan positiva hasta la fecha, “es un proyecto muy ilusionante”, destaca Marta Marín, que ambas entidades tienen la mirada puesta ya en una segunda parte del proyecto porque “han quedado muchos juegos en el tintero”, confiesan, y lo más importante: “Se puede enseñar a colegios profesionales, a residencias, colegios y llevarles la magia para que sea una actividad divertida dentro de su terapia”.

El equipo terapéutico pone de relieve que ha sido un equipo multidisciplinar el que ha llevado a cabo esta iniciativa, y que “precisamente eso es lo que le ha aportado una especial riqueza” a este libro, que definen como “mágico” en el más amplio sentido de la palabra. Demostrar que la magia “no es solo un entretenimiento” y que sirve para mucho más que “divertirse” es uno de los objetivos que tiene este proyecto social para la Sociedad Aragonesa de Ilusionismo.