Las tormentas se llevan por delante una carretera autonómica en Huesca y dejan aislados dos núcleos urbanos

Las fuertes tormentas registradas el lunes en la sierra de Guara, en la provincia de Huesca, se han llevado por delante la carretera autonómica A-1227, que ha tenido que ser cortada en dos puntos por el abundante agua y las piedras y barro que han levantado el asfalto a la altura de Yaso, en el término municipal oscense de Bierge.

Tanto el mencionado núcleo como el de Bastarás han quedado aislados ya que este es el único acceso hasta ahí. Desde la Dirección General de Carreteras e Infraestructuras se trabaja durante la jornada para abrir la carretera con el objetivo de abrir al menos uno de los dos carriles y poder dar paso alterno en dirección a Bierge y Abiego.

En concreto, los cortes se han registrado en los puntos kilométricos 30,800 y 27,200. En el primero de ellos, el agua y el material arrastrado se han llevado metro y medio de calzada, lo que ha impedido el paso de los conductores.

En el segundo de los puntos los daños han sido mayores, puesto que han afectado a cerca de 30 metros de carretera en ambos sentidos, según ha informado el Gobierno de Aragón. Esta actuación, de mayor calado, se llevará a cabo a través de una actuación de emergencia que requerirá un plazo próximo a los tres meses.

Para este miércoles, la Agencia Estatal de Meteorología mantiene el aviso naranja por lluvias en Huesca centro y Pirineo oscense hasta media mañana, y lo mismo en Albarracín, Jiloca, Gúdar y Maestrazgo de las 14:00 y las 23:59 horas.

Mientras, la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) mantiene la vigilancia por las intensas lluvias tras una madrugada con múltiples crecidas súbitas y avisos al 112 y ante la previsión de que este martes continúen las lluvias y los incrementos de nivel en los ríos.

Tras unas jornadas precedentes y una madrugada del lunes al martes de inestabilidad y precipitaciones tormentosas, son numerosos los cauces aragoneses que han experimentado, o están experimentando, crecidas súbitas de carácter ordinario pero también, en algunos casos, de carácter extraordinario y con capacidad para generar afecciones.

Las intensas lluvias, de más de 30 litros por metro cuadrado en una hora, en algunos casos, han afectado fundamentalmente a cauces de pequeña magnitud que, posteriormente, han trasladado sus crecidas a otros cauces más principales y con mayor capacidad de transporte.

Las crecidas que están generando más afecciones se localizan en el Sistema Ibérico. Durante la tarde de ayer, una tromba de agua en la margen izquierda del Jalón propició sendas crecidas extraordinarias en los afluentes Manubles y especialmente el Ribota. Esta circunstancia generó a su vez una crecida extraordinaria en el propio Jalón, aguas abajo de la población de Ateca, que circula en estos momentos por su tramo medio -en las proximidades de Morata de Jalón- con un caudal que ronda los 60 metros cúbicos, y que durante la jornada se desplazará hacia el tramo bajo del Jalón. 

Mientras, en la margen derecha de la cuenca del Jalón, otra importante tormenta al sur de la laguna de Gallocanta a primera hora de la tarde de ayer lunes generó un nuevo repunte en la cabecera del río Piedra, que alcanzó la localidad de Cimballa y que de madrugada llegó a Nuévalos.