ArcelorMittal vaciará el horno alto de Gijón, incendiado en marzo, con detonaciones controladas

Los trabajos de extracción del arrabio en el Horno Alto A de ArcelorMittal de Gijón, que sufrió un grave incendio el pasado 22 de marzo, no han dado resultado. La dirección de la empresa ha comunicado este martes a los sindicatos que la operación para recuperar las instalaciones no han servido para su vaciado.

El pasado 24 de abril se procedió a la colocación de un cordón detonante que no consiguió el objetivo de desestabilizar el material solidificado adherido a las paredes para que cayese. Después de probar con otras técnicas, igual de infructuosas, se ha decidido colocar explosivos en su interior a través de algunas de las toberas para intentar fragmentar el arrabio solidificado.

La generación de ruido será inevitable, según ha reconocido la empresa, pero ha mostrado su confianza en que no suponga una molestia importante en el entorno. También podrían generarse emisiones difusas asociadas a estas detonaciones que saldrían por la parte superior del horno, y que se espera que no tengan afección significativa.

El incendio supuso la firma de un acuerdo para la aplicación de un Expediente de Regulación Temporal de Empleo, en principio de seis meses, para los 7.000 trabajadores de la plantilla, ya que las instalaciones quedaron paralizadas.

El anuncio de estas veoladuras controladas llega en un día en el que la plantilla está llamada a secundar una nueva jornada paros, convocada por CCOO, para protestar por la falta de avances en las negociaciones del acuerdo marco.