Detienen a un hombre de 62 años como presunto autor de la muerte de un oso que quedó atrapado en un lazo en Ibias
En apenas tres meses, la Guardia Civil de Asturias ha logrado esclarecer la muerte de un oso pardo cuyo cadáver fue hallado el pasado mes de julio como consecuencia de las heridas sufridas al quedar atrapado en un lazo de acero en un monte cerca de la localidad de Villarmeirin, en el concejo de Ibias.
Los agentes han detenido a un hombre, de 62 años y vecino de este municipio, como presunto autor de la caza ilegal del ejemplar y le han imputado su responsabilidad en un delito contra la fauna y flora silvestre.
La Guardia Civil considera que el ahora detenido es la persona que colocó el lazo de acero para cazar, a través de este método ilegal, al oso pardo (Ursus Artus) que estaba dotado de un collar de radio-seguimiento.
Un lazo de acero
El hallazgo del cuerpo se produjo el pasado 10 de julio y nada más tener conocimiento de la aparición del cuerpo se desplazaron hasta el monte cercano a Villarmeirín los efectivos del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil de Asturias, el jefe de Sección de Vida Silvestre y Conservación, veterinario y agentes de Medio Natural de la Consejería de Medio Rural y Política Agraria, así como un técnico de la Fundación Oso Pardo.
Tras comprobar el estado del animal, pudieron ver que tenía un lazo de acero sujeto a su pata delantera derecha.
Los miembros del Seprona de la Guardia Civil y los integrantes de la Guardería del Medio Natural hicieron un reconocimiento de la zona para comprobar si había otros animales que pudieran haber estado expuestos a este método de caza ilegal y localizaron otros cuatro lazos, distribuidos por pares.
Se da la circunstancia de que el oso pardo se encuentra catalogado en peligro de extinción y la utilización de lazos es el medio más habitual de caza furtiva.
Las investigaciones
Desde el pasado mes de julio se estaban llevando a cabo las labores de investigación para tratar de determinar la autoría de la colocación del lazo, así como de la captura del oso.
Las indagaciones policiales han culminado con éxito gracias al trabajo desarrollado a través de la recopilación de las manifestaciones recogidas con testigos, así como del análisis de la documentación solicitada a la Consejería de Medio Rural y Política Agraria relativa a reclamaciones por daños causados por diferentes especies en el último año.
Una vez confirmada la presunta autoría, el pasado 3 de octubre los integrantes del Seprona procedieron a la detención de un vecino de Ibias, de 62 años. Las diligencias policiales instruidas han sido remitidas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Cangas del Narcea.
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