El doctor Cugat no cierra las puertas a que Villa juegue esta temporada 'Champions' y Eurocopa

BARCELONA, 19 (EUROPA PRESS)

Los doctores Ramon Cugat y Ricard Pruna, al frente de un amplio equipo, han operado satisfactoriamente este lunes al jugador del FC Barcelona David Villa de su fractura en la tibia izquierda, que le mantendrá entre cuatro y cinco meses de baja con la posibilidad no descartada de jugar esta misma temporada una hipotética final de 'Champions' y la Eurocopa, algo con lo que sueña el asturiano.

El doctor Cugat calificó de “un poco justo” el que el 'Guaje' pueda jugar esta misma temporada pero no lo descartó, pues por sus manos han pasado casos muy similares con recuperaciones muy rápidas. “Es un poco justo pero no se puede descartar. Creo que serán cuatro o cinco meses, pero hay que esperar a ver la evolución. Hemos tenido casos que han funcionado”, explicó en rueda de prensa.

“Soy humano, no un Dios, y puedo equivocarme. Hay que ver cómo irá la cicatrización, callo, evolución física... Él está animado para estar en la final de 'Champions' y la Eurocopa, lo quiere todo y es muy lógico. Quiere estar en todas, si él quiere trabajar... Ahora hay que estar 'tranquilitos'”, manifestó en referencia al postoperatorio, los dos primeros días, pues pueden ser “complicados”. Y es que el jugador no recibirá el alta hospitalaria hasta dentro de tres o cuatro días para estar bajo vigilancia.

En cuanto a la operación, explicó que se le ha colocado un clavo endomedular en la parte afectada de la tibia para alinearla de nuevo, mientras que la herida ya está cerrada y el jugador se encuentra en el hospital sin yeso. En unos días, empezarán los ejercicios mínimos de apoyar parcialmente (unos 25 kilos) la pierna, hasta que en unas seis semanas se le quiten algunos tornillos “para una dinamización del clavo y poder ir formando el callo”.

Cugat explicó que el jugador se rompió al hacer un esfuerzo de torsión en la parte anterior de la tibia, la menos resistente y que no deja más opción que “pasar por quirófano”. Precisamente, narró la anécdota del día, el miedo de Villa a la sala de operaciones. “'No quiero ver el quirófano', me dijo. Su preocupación era qué tipo de anestesia se le pondría y si podía ser en la habitación, que no. Le hacía mucho respeto ver el quirófano, le hemos dado una anestesia que le ha creado una nebulosa que le ha hecho no enterarse de nada”, explicó al respecto.

En cuanto a la demora en la operación, pues el jugador llegó de Japón el viernes por la tarde, fue debida a la inflamación en la pierna izquierda y a que el doctor Cugat no quiso intervenir por la inmediatez del vuelo. “Cuando un jugador sube al avión pueden pasar muchas cosas, algunas de ellas graves. Por experiencia propia lo conocía. Cuando llegó él incluso notaba que la cama tenía una presión”, explicó.

Por otro lado, explicó que la fractura de estrés que sufría el jugador no era motivo suficiente para hacerle pasar por quirófano antes de la rotura, pues Villa podía jugar como el resto de futbolistas y deportistas que sufren fracturas de estrés sin saberlo y continúan con la práctica deportiva hasta el fin de sus carreras sin romperse.

“Las fracturas de estrés son el quince por ciento en el gremio de deportistas. Es un fenómeno de sobrecarga, hay un punto en que se rompen las columnas óseas y como no se para no cura, lo tienes que dejar en reposo. Los jugadores pueden jugar y acabar su carrera con la fractura de estrés. No he conocido nunca a un jugador que se opere para que no se rompa. Me dicen que si un día les pasa algo ya se operarán”, espetó dejando claro que no hubo ninguna actitud irresponsable ni en el jugador ni en los servicios médicos del club.

Por su parte, el doctor del club, Ricard Pruna, explicó el buen estado anímico de Villa tras la intervención. “En Yokohama ya era bueno, ya preguntaba al presidente qué tenía que hacer y con un espíritu de curarse fundamental. Aquí empieza la recuperación. La intervención ha ido fantástica, le hemos ido a ver y estaba riendo, había orinado, que es muy bueno. Y enviando mensajes a compañeros. No veíamos a un postoperado tan vital al cabo de nada, media hora de subirle de quirófano”, celebró al respecto.

Y es que ambos coinciden en señalar que la actitud del asturiano ha sido impecable, así como la intervención. El viaje desde Japón fue consensuado por el jugador y el doctor Pruna pese a que era “arriesgado”, pero nada más ser visitado en el hospital de Yokohama por el presidente, Sandro Rosell, Villa aseguró que quería hacer lo más adecuado para jugar cuanto antes, algo que pasaba por ser operado en Barcelona en las mejores condiciones. “Decidimos trasladarlo a Barcelona porque entendimos que estaría mucho mejor atendido por nuestra gente. Asumimos un traslado con riesgos y complicado”, admitió Pruna.