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Ángel María Villar y Juan Padrón pagan la fianza y saldrán de la cárcel

Europa Press

Madrid —

El inhabilitado presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Ángel María Villar, y su hijo Gorka han pagado las fianzas de 300.000 euros y 150.000 euros, respectivamente, impuestas por el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz, por lo que este martes saldrán de prisión, han informado fuentes jurídicas. También abandonará la cárcel el vicepresidente económico del organismo, Juan Antonio Padrón, tras abonar el mismo importe que Villar.

Los tres investigados saldrán de la prisión de Soto del Real (Madrid) una vez que el juez del caso Soule autorice su libertad tras comprobar que han consignado dichas cantidades fijadas en las cuentas del Juzgado. Las mismas fuentes han precisado que padre e hijo han abonado las fianzas mediante transferencia bancaria.

El juez instructor dictó este lunes un auto en el que puso en libertad provisional bajo fianza a estas tres personas, que se encuentran en prisión incondicional desde el pasado 21 de julio en el marco de la investigación del presunto desvío de fondos de la Federación de Fútbol a empresas vinculadas a la trama.

Además, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional obliga a estos tres investigados a comparecer semanalmente ante el juzgado, la retirada del pasaporte, además de facilitar un teléfono móvil donde puedan ser localizados y llamados en cualquier momento para ponerse a disposición del juzgado.

El juez Pedraz afirma en su auto que aunque siguen existiendo motivos para considerarles responsables criminalmente de los delitos imputados “resulta oportuno modificar la situación personal” de los tres tras haber practicado una serie de diligencias como volcado, y depósito y custodia de la documentación requerida e intervenida para su análisis, así como declaraciones de más investigados y testigos.

Además, asegura que junto a “las medidas cautelares reales” decretadas “difícilmente podrían obstaculizar la instrucción de la causa”, ya que la documentación no puede ser “alterada”, ni pueden “influir” en los testigos y en el resto de investigados a los que ya se tomado declaración, así como ocultar bienes y patrimonio gracias a que sus cuentas están bloqueadas y embargadas. Asimismo, el juez Pedraz señala que no existe riesgo de fuga al acordar las fianzas y el resto de medidas de control.

El magistrado ya apuntó en el auto por el cual decretaba prisión para Villar, su hijo Gorka, Padrón y el secretario de la Federación Tinerfeña, Ramón Hernández Baussou -en libertad tras abonar una fianza de 100.000 euros- que al menos desde 2009 el directivo creó un entramado para la desviación de fondos tanto públicos como privados de la RFEF y organismos vinculados a ellos para garantizar su permanencia al frente del puesto que ostenta desde el año 1988.

Excesos administrativos

Pedraz sospecha que Villar ha cometido “excesos administrativos” por un lado con el nombramiento de los miembros de la Junta Directiva (que utiliza a modo de recompensa para premiar la lealtad de los presidentes de las federaciones afines o vetar a los que le son contrarios), y por otro, con la concesión de beneficios a los que han favorecido su candidatura.

El magistrado destacó que se estableció una red de “clientelismo” para la contratación del personal que recae en familiares de los acusados como en la presunta adjudicación arbitraria de contratos de suministros. Además, afirmó que los acusados cometieron estos hechos con la voluntad “de enriquecerse y favorecer el enriquecimiento de terceros”.

El expresidente de la RFEF, su hijo Gorka -sin cargo en el organismo deportivo-, y Padrón están investigados por los presuntos delitos de administración desleal, apropiación indebida, estafa, falsedad documental y corrupción entre particulares por desviar fondos de la Federación de Fútbol a empresas vinculadas a esta trama.