Seis nombres clave en el ascenso del CD Tenerife del que hoy se cumplen 30 años

El CD Tenerife cumple hoy 30 años de su segundo ascenso a Primera División. La dulce derrota en el viejo Benito Villamarín ante el Real Betis quedó en una anécdota gracias la victoria (4-0) en la ida de la promoción. Veintiocho años después de su único asalto a la élite hasta entonces, el éxito de los blanquiazules se explica, además de por la labor de Benito Joanet (entrenador) o Rommel Fernández (máximo goleador), por el trabajo de otras seis personas, igualmente decisivas.

Javier Pérez: Tres años y doce días. Eso tardó el presidente del mejor Tenerife de la historia en llevar al club desde la ruina de la Segunda División B a la máxima categoría. Se rieron de él cuando, al llegar, prometió la Primera División. Y cuando alcanzó la élite, apostó por la UEFA y volvieron a burlarse…

José Antonio Barrios: Llegó al club con Pérez y le dio canariedad al equipo. Recuperó a David Amaral o Víctor Celso y apostó por la cantera. ¿El resultado? El Tenerife subió a Primera División con siete canteranos (Isidro, Quique Medina, Toño, David Amaral, Víctor, Luis Delgado y Rommel) en el once base.

Eduardo Belza: Venía de descender (sin jugar apenas) con el Mallorca para ser suplente de Salva. Al final, jugó todos los partidos de Liga, tuvo actuaciones muy destacadas y se ganó el cariño de los aficionados. Y el curso siguiente, en Primera División, fue decisivo en la permanencia del equipo.

Víctor Celso: Fichó con 18 años por el CD Tenerife tras triunfar (y ascender) con el San Andrés. Con 21 años ya era titular en Primera División y cuando regresó a casa encadenó dos ascensos casi consecutivos con protagonismo máximo. Fue el segundo máximo goleador del equipo (ocho tantos) tras Rommel Fernández.

Guina: Vino ya veterano tras ascender a la élite dos veces con el Murcia, pero cuajó tres temporadas notables en el Tenerife. Y durante el curso de su tercer ascenso a Primera División fue vital. La conexión Guina-Rommel dejó más de una docena de goles y un recuerdo imborrable.

David Amaral: El capitán. Jugó 33 partidos y marcó siete goles durante el campeonato. Básico para Joanet, una lesión hizo que su presencia en la promoción ante el Betis fuera testimonial. Es el único jugador del CD Tenerife que puede presumir de tres ascensos y ningún descenso. Nunca jugó en Primera División.