El Herbalife Gran Canaria y Aqualia han renovado este jueves su acuerdo de colaboración para continuar concienciando a la sociedad canaria sobre la importancia de cuidar del medio ambiente.
“Este año ampliamos la colaboración con los colegios y con el deporte base ofreciendo balones y material deportivo”, ha explicado durante la firma del acuerdo en el Gran Canaria Arena el jefe de producción de Aqualia en la provincia de Las Palmas y en el norte de Tenerife, Braulio Domínguez.
Además, la empresa de gestión del ciclo de aguas colaborará “con la asistencia de los municipios a los partidos” en el Gran Canaria Arena y repartirá un díptico para “concienciar, sobre todo a los niños, de que no deben usar el váter como una papelera”.
El acuerdo de patrocinio se inició la pasada temporada con el objetivo de activar un proyecto que promoviera el buen uso del inodoro, ha explicado el presidente del Club Baloncesto Gran Canaria, Enrique Moreno, quien también ha destacado que esta colaboración tiene “una doble virtud”.
Ha apuntado que la primera es concienciar a la ciudadanía sobre el uso de las toallitas y dar a conocer el programa #nolotires de Aqualia, para evitar que los papeles lleguen al mar sin destruir y dañen las costas, mientras que la segunda es apoyar el proyecto del Herbalife para llevar el baloncesto a todos los municipios de Gran Canaria.
Por su parte, Domínguez ha recordado que esta colaboración tuvo el año pasado “unos efectos muy positivos” en la sociedad del archipiélago, por lo que espera que se mantenga también de cara a los próximos ejercicios.
La campaña #nolotires de Aqualia busca promover una conducta responsable en el uso del agua y, para ello, ofrece indicaciones sobre cuál es el lugar correcto para deshacerse de residuos como las toallitas, el aceite, los fármacos y los productos cosméticos.
En concreto, las toallitas pueden generar atascos en las tuberías y desbordamientos en las aguas fecales de las calles, además de roturas en las depuradoras, mientras que cada litro de aceite arrojado por el fregadero puede contaminar hasta 1.000 litros de agua.