Socios del Club Natación Las Palmas presentan una querella contra su ex presidenta
Socios del Club Natación Las Palmas han presentado una querella contra su ex presidenta, María Fernanda Bissoni, por presuntos delitos tipificados en el Artículo 290 del Código Penal, es decir, por mentir, alterar o no reflejar la verdadera situación económica o jurídica de la entidad.
La historia comenzó en mayo de 2013, cuando varios socios se movilizaron para recoger firmas con el objetivo de hacer una asamblea en la que se presentaran las cuentas del año anterior y los presupuestos de ese año. Según estos socios, el balance económico que Bissoni presentó en la citada reunión no se ajustaba a los documentos que mostraban. Además, en dicha asamblea el secretario del club dimitió, por lo que la junta directiva se quedó con menos de cinco miembros, cosa que no permite el Artículo 16 de los estatutos del club, por lo que el acta firmada por la presidenta presentó presuntas irregularidades.
Tras realizarse dicha asamblea en el mes de julio, los miembros del club, a través de dos burofaxes, solicitaron la presentación de las cuentas y las actas acogiéndose al Artículo 8 de los estatutos del club, sin llegar a conseguirlo, y ante esta negativa presentaron una diligencia previa en el juzgado para que la administradora del club presentara la documentación en el tribunal. Así, la presidenta entregó documentación en la que faltaban datos, por lo que se le volvió a pedir esta información hasta que tuvieron todas las cantidades de los balances económicos.
Después de estudiar las actas estos socios vieron presuntas irregularidades, como acuerdos sin firmar por la secretaria que la propia Bissoni aprueba, falsificación en las cuentas o alteración de las actas de las asambleas.
Así, con las cuentas en las manos estos afiliados del club decidieron contratar a un perito independiente para que estudaria la contabilidad de la institución, y en dicho peritaje se concluye que la información financiera aportada a los socios no se corresponde a la realidad financiera del Club Natación Las Palmas: la directiva aseguraba que el club había tenido un superávit de 20.000 euros y el peritaje concluyó que realmente el año 2012 tuvo un déficit de 90.000 euros. Ante esta resolución decidieron presentar, el pasado mes de marzo, la querella que actualmente está en juzgado esperando la aceptación.
Dimisión de la presidenta
El pasado dos de abril se realizó otra asamblea en la que se pretendían aprobar los presupuestos de 2013. Los socios decidieron impugnarla por irregularidades en la convocatoria, porque no convocaba a los miembros del club con acuse de recibo y por querer aprobar las cuentas del 2013 cuando las de 2012 no fueron ratificadas. Además, en esa misma reunión decidieron informar a Bissoni de que le habían presentado la querella, lo que motivó la posterior dimisión de la junta directiva.
Otra de las irregularidades que han denunciado las fuentes consultadas por Canarias Ahora fue que tras la dimisión del secretario el pasado mes de julio, este seguía figurando como tal en el Registro de Entidades Deportivas de Canarias nueve meses después, cuando, tras una dimisión, los socios aseguran que esto se debe comunicar en un máximo de 30 días. Además, el propio Gobierno de Canarias ha certificado que el club, a 9 de enero de 2014, no se encontraba al corriente en el cumplimiento de sus obligaciones registrales.
Ahora Las Palmas, que cuenta con más de 1300 socios, se encuentra, según esta fuente, en “una situación de desamparo y según recoge los estatutos, se ha hecho cargo del mismo una junta rectora formada por los socios más antiguos, que han convocado asamblea para este 24 de abril con dos objetivos: presentar la deuda del club y convocar la junta electoral que admita o no las plataforma que se van a presentar a las elecciones”. Sin embargo, no acaban aquí los despropósitos ya que la ex presidenta, ateniéndose a los artículos 16.4.b, 25.1.d y 28.1.b, ha convocado otra para el 25 con el fin de convocar elecciones, aunque como protestan estos socios, “olvidándose de las cuentas”.
Ante esto, estos afiliados a Las Palmas, que aseguran que se han sacrificado por mostrar la realidad del club, reclaman que la directiva “dé un paso a un lado tras haber dimitido y facilite la transición en el marco de la legalidad que marcan los estatutos y la ley del deporte canario, facilitando por el bien del club la total difusión a la masa social de la constitución de la comisión rectora y posterior convocatoria de elecciones”.
El Club Natación de Las Palmas es uno de los clubes con más prestigio en la natación canaria. De su cantera han salido deportistas olímpicos como Frederik Hviid o la nadadora de sincronizada Paola Tirados, medallista en los Juegos de Pekín. Además, tiene una sección de natación adaptada, una de las primeras entidades en abrir la natación para gente con discapacidades físicas e intelectuales, que ha cumplido a lo largo de los años una gran labor social. De esta sección ha salido Miguel Déniz, doble medallistas en los Juegos de Sydney. También de la piscina próxima al Parque Doramas salió uno de los mejores deportistas españoles en la natación paralímpica, Enhamed Enhamed, que logró nueve medallas en los Juegos de Atenas, Pekín y Londres. En los últimos años la institución ha visto cómo caían los socios y ha pasado de cerca de 2000 en el año 2012, a los 1300 actuales. Esto se ha debido, entre otras cosas, a no saber amoldarse a la competitividad de los tiempos y no reaccionar ante la apertura de otros centros deportivos en la ciudad.