El Cabildo de Tenerife investiga si una cooperativa vinculada a la presidenta de Asaga almacenó papas de Egipto en instalaciones públicas

Imagen de un camión cargado con 'yumbos' de papas de consumo, según lo afirmado por el operario que las pertrechó, justo después de sacarlas de las naves que el Cabildo posee en Benijos, el 29 de agosto de 2024.

Román Delgado / Álvaro Morales

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El área de Sector Primario y Bienestar Animal del Cabildo de Tenerife ha abierto una investigación para acceder a toda la información y averiguar si la Cooperativa Agraria Garañaña, de la isla de Tenerife y a la vez una organización de productores de frutas y hortalizas (OPFH) con actividad principal en la papa, ha almacenado tubérculo importado en las instalaciones públicas que la citada Corporación insular arrendó, en el barrio de Benijos (La Orotava), a la mencionada entidad productora durante los meses de mayo a agosto pasados. Si esa acción se hubiera producido, que es lo ahora investigado, habría un claro incumplimiento del contrato formalizado por las partes, además en un momento en que el objetivo claro de las administraciones públicas era potenciar la venta de la papa de producción local en su periodo de cosecha más importante en las islas, de manera especial en Tenerife.

Según el contrato de alquiler firmado entre las partes del 2 de mayo al 31 de julio de este año, cuya vigencia se prorrogó un mes más, del 1 al 31 de agosto de 2024, la Cooperativa Garañaña, cuyo presidente es Jesús Iván Bethencourt Álvarez y entidad estrechamente vinculada a la presidenta de Asaga, Ángela Delgado (como también lo está a la sociedad importadora de papas Cadimisa, que las trae, entre otros orígenes, de Israel y Egipto, la firma Tilena y la Cooperativa Agraria San Miguel -Casmi-, que además preside), solicitó al Cabildo de Tenerife, a través de escrito presentado con fecha de 5 de abril de 2024, “el uso temporal de una parte de las instalaciones de recepción, procesado, almacenaje y comercialización de papas [que la Corporación insular posee en el barrio de Benijos, en La Orotava] por un periodo de dos meses [no tres], coincidiendo con el periodo correspondiente a la recogida de papas de la campaña extratemprana y temprana”.

En ese documento de solicitud de arrendamiento por la parte privada a la pública, según la primera resolución del Cabildo sobre esta relación, se afirma, en el punto V del epígrafe antecedentes, que la Cooperativa Garañana, “con fecha de 5 de abril de 2024, solicita para el reparto de semillas de papas para la siembra de la próxima campaña el uso temporal de una parte de las instalaciones (…) [públicas] de papas en Benijos, en concreto, 500 metros cuadrados de la nave principal, la cámara frigorífica de 500 metros cuadrados, una oficina de 15 metros cuadrados y un aseo de cinco metros cuadrados, solo y únicamente para el uso indicado [reparto de semillas de papas para la siembra], por un periodo de dos meses”, que fueron tres (de mayo a julio) y uno más a través de prórroga, previa resolución del Cabildo y durante todo agosto de 2024.

Atendiendo a lo descrito en la primera resolución, firmada por el consejero insular de Sector Primario el 27 de abril de 2024, se aprueba la celebración del contrato de arrendamiento para los espacios y el uso descrito, “únicamente”, del 2 de mayo al 31 de julio de 2024. Este periodo, ya se ha dicho, luego se extiende un mes más, a todo agosto y a través de una prórroga, hasta completar cuatro meses totales.

En el Anexo I de la primera resolución, el texto específico del contrato rubricado por el arrendador, el Cabildo, y la arrendataria, la Cooperativa Garañaña, se detalla, en el punto tercero del manifiestan, que la citada Cooperativa “está interesada en ocupar temporalmente la parte de las instalaciones indicadas [dentro del complejo industrial de Benijos] en el punto anterior por el periodo correspondiente al reparto de semillas de papas para la siembra de la próxima campaña”, algo que nada o muy poco tiene que ver con la gestión de la papa de consumo de origen local.

La duración de ese contrato, con la prórroga aprobada de un mes, ha terminado siendo de cuatro meses; la Cooperativa Garañaña ya ha devuelto las instalaciones arrendadas al Cabildo de Tenerife dentro del plazo fijado, y el precio abonado “por adelantado” por la entidad productora ha sido de “80,50 euros por día, impuestos indirectos no incluido”, lo que conduce a la cifra global de 9.660 euros por cuatro meses.

Ahora bien, las dudas sobre el uso adecuado de esas instalaciones públicas, que es lo que ya investiga el área de Sector Primario del Cabildo de Tenerife, se producen debido a que vecinos y agricultores de la zona detectan la llegada de camiones con contenedores de papas, hasta cinco y supuestamente importadas, que aseguran se almacenaron en esas naves industriales del Cabildo, a lo que se une la salida de planchas con yumbos rellenos de papas de consumo (como los de la foto) que algunos trabajadores directos o indirectos del arrendatario, al ser preguntados sobre el contenido de esos envases (el 29 de agosto de 2024), indican que se trata de papas importadas sacadas de la nave para proceder a su comercialización.

Hay que decir, llegados a este punto, que, tras un parón de varias semanas en la venta de papas de Egipto para empujar la salida de la producción local canaria, al menos en la red de distribución isleña de la empresa Mercadona, desde hace unos días ese tubérculo se ha vuelto a ofertar en los estantes de esos supermercados (como se aprecia en la imagen aquí reproducida). Es todo género con la marca Cadimisa. Esta empresa es la que surte de papa importada a Mercadona en las islas, al menos una de ellas y, sin duda, de las más importantes.

El arrendatario prefiere no responder a la pregunta clave

En relación con la cuestión analizada y preguntados al respecto tanto el presidente de la Cooperativa Garañaña, Jesús Iván Bethencourt, como la persona que gestiona el grupo de empresas vinculadas a Casmi y Cadimisa, Ángela Delgado, a su vez presidenta de la organización profesional agraria Asaga-Asaja, ambos indicaron, en conversación telefónica, lo siguiente…

En primer lugar, el presidente de Garañaña, Jesús Iván Bethencourt: “Mira, para eso es mejor Ángela [Delgado] porque es la que lleva más ese tema, más que yo. Te voy a decir y no te voy a poder contestar porque Ángela es la que ha estado siempre, desde un principio, ahí [con la instalación de Benijos]”. A la pregunta concreta sobre la posible presencia de papa de Egipto en esas naves públicas del Cabildo, Bethencourt se limitó a decir que, “como te digo, este tema lo lleva más Ángela que yo…”.

Y en segundo lugar, Ángela Delgado, la persona de referencia en el grupo de empresas: “No tengo nada que decir de la nave de Benijos”. A la pregunta específica sobre la entrada en esa instalación de papa de Egipto, solo repitió: “Nosotros no tenemos la nave. Ya se ha entregado al Cabildo. No tenemos la nave”.

El Cabildo de Tenerife y la decisión de ahondar en lo ocurrido

En relación con este mismo asunto, tras consulta realizada al gabinete de comunicación del área insular de Sector Primario, cuyo responsable es Valentín González (PP), se trasladaron por escrito las siguientes conclusiones: “Le comunicamos que el área insular [mencionada] se ha dirigido a la Cooperativa Garañaña con la finalidad de aclarar la veracidad de las informaciones obtenidas respecto al origen de la papa almacenada en las instalaciones propiedad de esta Corporación insular, que fueron cedidas en régimen de arrendamiento a esa cooperativa con la única finalidad de poder almacenar papas de la zona [o sea, las llamadas del país, aunque el contrato de arrendamiento rubricado y su prórroga solo admiten, en principio, papa de semilla, no de consumo aunque sea local, y en ningún caso se habla o admite la papa importada]”.

También se reitera en la respuesta recibida del Cabildo “que la justificación de la utilización de las instalaciones [públicas] de Benijos por parte de la Sociedad Cooperativa Agraria Garañaña [entidad privada] era exclusivamente para mejorar y ordenar la recogida y manipulación de una parte de la papa producida en la zona [la de la cosecha temprana, la más importante del año], ante la situación de adelanto y posible pérdida de calidad de la cosecha y para evitar una mayor afección en la postcosecha debida a la polilla guatemalteca”.

El planteamiento del Cabildo de Tenerife finaliza con que, “en este momento, nos encontramos a la espera de la respuesta por parte de la Cooperativa Garañaña al requerimiento de información que ha realizado este Cabildo en relación con la información que ha trascendido sobre el contrato de arrendamiento que estaba vigente hasta el pasado 31 de agosto].

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