Espacio de opinión de Canarias Ahora
Canarias, un fiasco de Presupuesto
Los mismos que se han desgañitado estos meses criticando a los Presupuestos Generales del Estado debieran haber copiado algunos de sus logros. Al menos para que sobresalgan menos sus carencias y la ausencia de un proyecto de futuro que aborde los grandes retos del Archipiélago en formación y en renovación de la planta turística obsoleta, cuyas partidas no sólo no se incrementan, sino que se reducen en 4,5 millones de euros.
Tampoco se avanza en la progresiva definición de un modelo de desarrollo sostenible, desde el incremento del peso de las energías renovables y la apuesta por un consumo eficiente a la apuesta por una movilidad menos contaminante que la actual y con mayor peso del transporte público.
Son muchos los aspectos en que salimos perdiendo respecto al Presupuesto estatal. Esto pasa con relación al objetivo de la productividad, con el incremento en gasto en capital humano y tecnológico, mucho mayor en el estatal. O con el de infraestructuras, que aumenta en los PGE en un 11,5% respecto a 2007. O, en fin, con el Gasto Social, que se eleva de forma notable en las cuentas estatales, para abordar la aplicación de la Ley de Dependencia, así como para incrementar las pensiones o las ayudas a los programas de vivienda.
Inversión
Y, además, los Presupuestos del Estado para 2008 destinarán casi 1.000 millones de euros en inversión al Archipiélago. De ellos, 662 millones están contemplados en el Capítulo VI de inversiones de la actual propuesta legislativa y 171 en el Capítulo VII de transferencias, a los que se suman 90 millones de euros del Fondo de Compensación Interterritorial y los más de 65 millones que conllevan las enmiendas presentadas por Nueva Canarias. Unas enmiendas que suponen partidas para Canarias destinadas a infraestructuras educativas, transporte o presupuesto para la creación del consorcio para la rehabilitación de la ciudad turística de San Bartolomé de Tirajana.
Esta cifra sitúa la inversión del Estado en Canarias en el 4,02% del total de los presupuestos, casi el doble de lo que fue la media de inversión del Gobierno Aznar, que nunca superó el 2,2%. Y cuatro veces la de los gobiernos de Felipe González.
Mientras, los Presupuestos de Canarias para el próximo año carecen, precisamente, de todo lo que ATI-CC y el PP critican -sin fundamento y exclusivamente por razones de estrategia política de confrontación con el Gobierno central y de airada reacción ante la pérdida absoluta de influencia en el concierto estatal- , a los Presupuestos del Estado. Esto ocurre con las recetas que presentan ante las incertidumbres de la situación económica y la previsible bajada del crecimiento de nuestra economía. Aseguran que es un presupuesto anticíclico. En ese sentido, debiera basarse en dos ejes: rebaja de impuestos para estimular el consumo y aumento de la inversión pública. Nada de eso se plantea en las cuentas canarias
En ambos aspectos, la propuesta presentada por el consejero Soria pincha por completo. Los impuestos bajan de forma muy pequeña, no progresiva y por tanto injusta, con una reducción de 15 millones de euros en el Impuesto de Sucesiones y de sólo dos en el IRPF. Y la inversión sólo llega al 1,9%, mucho menor que la estatal y por debajo de las expectativas de crecimiento económico de Canarias, cifrado en un 2,6%, y de la propia inflación. Como ven, un auténtico fiasco.
Además, y para comprobar la preocupación del Gobierno por el servicio público educativo, clave para mejorar la formación de nuestra gente y superar los atrasos que aún presenta Canarias, y esencial también para mejorar las perspectivas de empleo futuras, la partida destinada a Educación sube muy por debajo de la media del crecimiento del Presupuesto canario.
Por otra parte, los presupuestos de Canarias mantienen los desequilibrios entre las Islas y maltratan a los cabildos, con la reducción en un 15% en las transferencias desde el Gobierno de Canarias, quien en cambio cuenta con 400 millones de euros no territorializados, discrecionales, para manejar a su antojo. Asimismo, es poco presentable el despilfarro en la TV Canaria, con un incremento del 33%, y en el departamento macro creado para el presidente del Gobierno, un gobierno paralelo con 17 centros directivos.
No hemos sido los únicos en criticar este presupuesto. Lo ha hecho el Cabildo de Lanzarote que denuncia el trato que recibe su isla. Y, asimismo, el descontento abarca a las propias filas de CC, con el rechazo del presidente del Cabildo de Fuerteventura. Y, también, los sindicatos.
Para que respondan de verdad a los intereses generales de los ciudadanos y ciudadanas de Canarias mucho tendrán que cambiar estos presupuestos en el proceso de enmiendas. Esencialmente, corrigiendo los desequilibrios, como ocurre con los 8,3 millones para transporte que van a Tenerife frente a los cero para Gran Canaria, desequilibrios ya corregidos en las cuentas estatales. También es prioritario mejorar las partidas en Educación y las dirigidas a rehabilitación turística. Asimismo, es imprescindible que esos 400 millones discrecionales se territorialicen y cubran déficit en equipamientos industriales o inversiones en puertos. Sólo así se salvarán unos presupuestos que, en su actual formulación, son absolutamente impresentables.
* Román Rodríguez es presidente de Nueva Canarias.
Román RodrÃguez *
Los mismos que se han desgañitado estos meses criticando a los Presupuestos Generales del Estado debieran haber copiado algunos de sus logros. Al menos para que sobresalgan menos sus carencias y la ausencia de un proyecto de futuro que aborde los grandes retos del Archipiélago en formación y en renovación de la planta turística obsoleta, cuyas partidas no sólo no se incrementan, sino que se reducen en 4,5 millones de euros.
Tampoco se avanza en la progresiva definición de un modelo de desarrollo sostenible, desde el incremento del peso de las energías renovables y la apuesta por un consumo eficiente a la apuesta por una movilidad menos contaminante que la actual y con mayor peso del transporte público.