Canarias Ahora Opinión y blogs

Sobre este blog

Censura y nueva etapa política

Nueva Canarias apoyó, en el Congreso de los Diputados con el voto de su diputado Pedro Quevedo, la moción de censura presentada por el PSOE contra Mariano Rajoy. Una decisión política pero, también, un imperativo ético tras la publicación de la sentencia del caso Gurtel. Un fallo judicial que se suma, en el plazo de apenas un mes, al escándalo protagonizado por Cristina Cifuentes, que llevó a la dimisión de la hasta entonces presidenta de la Comunidad de Madrid, y a la detención del exministro Eduardo Zaplana, acusado de muy graves delitos, así como a la incapacidad del PP para superar los gravísimos casos de corrupción, que han carcomido la estructura de su partido y hecho un daño incalculable a la democracia española.

La moción de censura tiene una regulación constitucional y es propia de las democracias parlamentarias. Constituye una medida que consideramos precisa y adecuada por la entidad de la crisis que ha sacudido la credibilidad de las instituciones y dañado gravemente a la democracia. Era el mecanismo indicado para exigir responsabilidades políticas al Gobierno del PP que, en ningún momento, ha sido capaz de asumirlas. Es, además, una fórmula habitual en países de nuestro entorno político. Así lo entendió la mayoría de la Cámara que votó favorablemente a la misma y posibilitó la investidura de Pedro Sánchez como nuevo presidente del Gobierno, con más escaños y más votos ciudadanos que los de los que pretendían mantener la situación.

Acuerdo PSOE-NC

Se trata de una moción presentada por el principal grupo de la oposición, el partido socialista. Con el que concurrimos en las elecciones generales de 2015 y de 2016, compartiendo programa y candidato, Pedro Sánchez. Un candidato al que apoyamos cuando se presentó a la investidura en marzo del año 2016, finalmente fallida. Mientras que votamos no a Rajoy, tanto en agosto como en octubre de ese mismo año.

En ese acuerdo, PSOE-Nueva Canarias, bajo el lema Por el cambio político y el progreso de Canarias, incluimos una agenda canaria que recogía, entre otros aspectos, la reforma del sistema de financiación –colocándonos en la media de las comunidades autónomas, para poder garantizar los servicios públicos-, el respeto al Régimen Económico y Fiscal (REF) en los Presupuestos Generales del Estado, la revisión de los mecanismos de dinamización económica del REF, recuperar lo detraído en el convenio de carreteras e impulsar un ambicioso plan por el empleo y contra la pobreza. Aprobando el nuevo Estatuto y reformando el injusto sistema electoral canario.

Asimismo, PSOE y Nueva Canarias establecimos en el acuerdo un compromiso con políticas estatales que acabaran con los recortes, generaran empleo, se enfrentaran a la precarización y a la elevada pobreza, los desahucios y la creciente desigualdad, recuperando la primacía de los dañados servicios públicos. Así como avanzar hacia un pacto territorial de naturaleza federal. Nos comprometimos, como hemos cumplido en todas las ocasiones, a apoyar al candidato Pedro Sánchez.

Hemos aprovechado la aritmética parlamentaria para mejorar la situación e incrementar los recursos para Canarias en la negociación de las cuentas públicas para 2017 y 2018. De manera muy importante hemos conseguido la separación de los recursos fiscales del REF de los correspondientes a la financiación autonómica, aumentado los recursos para la sanidad, la educación y los servicios sociales y consiguido que muchas de las medidas adoptadas se incorporen al REF (e incluso al Estatuto) y tengan, por tanto, carácter permanente.

En ese sentido, nos parece importante la aceptación de las propuestas adelantadas por NC de mantener los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2018, aprobados recientemente por el Congreso y que aún se están tramitando. Así como la continuidad de la agenda legislativa canaria.

Consideramos que es el mejor presupuesto desde la crisis y que supone sustanciales mejoras en el ámbito estatal (elevación de las pensiones, subidas salariales a funcionarios, relevantes partidas presupuestarias para abordar la lucha contra la violencia de género…) y para Canarias, que ve corregidas situaciones injustas que lastraban su desarrollo y el funcionamiento de sus servicios públicos. Entre ellos, desde los recursos destinados a la lucha contra la pobreza hasta la bonificación del 75% en los billetes aéreos y marítimos entre Canarias y el resto del Estado.

Como bien señaló nuestro diputado en su intervención, no se trata de caprichos, sino de actuaciones que corrigen los hándicaps de nuestra lejanía y fraccionamiento territorial y que nos hacen más iguales al resto de ciudadanos y ciudadanas del Estado español.

En el asunto presupuestario no hay alternativa, salvo prorrogar las cuentas públicas de 2017, mucho peores en todos los aspectos para la ciudadanía pero también para las entidades locales y las comunidades autónomas. Le corresponde ahora al nuevo Ejecutivo buscar acuerdos con los grupos y disponer, en tiempo y forma, de las cuentas públicas para 2019, lo que seguro no será sencillo.

Reforma laboral

Compartimos lo expresado por Sánchez en relación a la imprescindible recuperación de la sanidad universal, las modificaciones de la ley mordaza y las medidas para lograr el máximo de independencia y pluralismo en la deteriorada televisión pública española, tal y como reclaman sus profesionales y la mayoría de las fuerzas políticas.

Estas deben ser algunas de las acciones del nuevo Ejecutivo junto, en nuestra opinión, a medidas que supongan un significativo giro en las políticas económicas y sociales. Entre ellas, modificaciones en la agresiva reforma laboral impuesta por la mayoría absoluta del PP. Así como una apuesta decidida por la recuperación de los servicios públicos.

En el caso de nuestra comunidad, aspiramos a cerrar en un período inmediato la tramitación del REF económico y el nuevo Estatuto de Autonomía, incluida la reforma del sistema electoral canario.

No lo va a tener fácil el nuevo titular de Ejecutivo. Precisará de mucha capacidad de diálogo y de búsqueda de consensos para sacar adelante los grandes temas de aquí al final de la legislatura. Para avanzar desde un punto de vista progresista y posibilitar que se comience a revertir una situación en la que España ha retrocedido en derechos y libertades y se ha convertido en uno de los estados con mayor desigualdad de la Unión Europea. En esos objetivos transformadores contará, sin duda, con nuestro modesto apoyo.

Nueva Canarias apoyó, en el Congreso de los Diputados con el voto de su diputado Pedro Quevedo, la moción de censura presentada por el PSOE contra Mariano Rajoy. Una decisión política pero, también, un imperativo ético tras la publicación de la sentencia del caso Gurtel. Un fallo judicial que se suma, en el plazo de apenas un mes, al escándalo protagonizado por Cristina Cifuentes, que llevó a la dimisión de la hasta entonces presidenta de la Comunidad de Madrid, y a la detención del exministro Eduardo Zaplana, acusado de muy graves delitos, así como a la incapacidad del PP para superar los gravísimos casos de corrupción, que han carcomido la estructura de su partido y hecho un daño incalculable a la democracia española.

La moción de censura tiene una regulación constitucional y es propia de las democracias parlamentarias. Constituye una medida que consideramos precisa y adecuada por la entidad de la crisis que ha sacudido la credibilidad de las instituciones y dañado gravemente a la democracia. Era el mecanismo indicado para exigir responsabilidades políticas al Gobierno del PP que, en ningún momento, ha sido capaz de asumirlas. Es, además, una fórmula habitual en países de nuestro entorno político. Así lo entendió la mayoría de la Cámara que votó favorablemente a la misma y posibilitó la investidura de Pedro Sánchez como nuevo presidente del Gobierno, con más escaños y más votos ciudadanos que los de los que pretendían mantener la situación.