Sobre este blog

Espacio de opinión de Canarias Ahora

¡Cuánto idiota anda suelto comentando el cincuentenario de la dictadura cubana!

Iñaki Anasagasti / Iñaki Anasagasti

0

Y sin embargo cincuenta años de Revolución Cubana han logrado lo que jamás hubiera logrado Pinochet con la sociedad en plena bonanza económica, que nadie haya dicho que son cincuenta años de una vergonzosa dictadura. Cincuenta años de un país sin elecciones democráticas, cincuenta años de cárceles llenas, cincuenta años de embargo norteamericano si, pero cincuenta años de embargo de las libertades más absolutas. Y es que Fidel Castro y su fotogénica revolución, con aquel sicópata asesino llamado el Che Guevara convertido en icono, hace que tengamos unas tragaderas que nadie tendría en Europa con Pinochet, Somoza o gentuza parecida.

En 1968 Fidel Castro apoyó la invasión de Checoslovaquia por la Unión Soviética. La gente decente esperaba que apoyara a Alexander Dubcek, pero como le convenía apoyar a Beznef, porque vivía de él, hizo lo que hizo. Hoy su hermano proclama que la Revolución no dará un paso atrás ni en un milímetro. El poder se lo han pasado de hermano a hermano sin elección alguna.

Fidel Castro que nombró a su hermano heredero de la dictadura, aunque siga mandando tras la cortina, creó la dictadura más larga de la historia escrita (casi medio siglo), pero también la más ineficaz y caprichosa, consagrada a criar vacas enanas, a conquistar África y a otras tareas inverosímiles. Las cinco necesidades básicas de la vida moderna son cinco martirios para los cubanos: alimentos, agua, vivienda, transporte y vestido. El extendido sistema de educación sólo ha servido para crear una legión de profesionales que desea largarse del país porque el colectivismo los condena a la miseria. Cuando muera, sin embargo, Castro dejará a los cubanos un legado valioso: la lista minuciosa de todo lo que no se debe hacer si uno quiere gobernar bien.

Y un dato final. Los hermanos Castro son los ídolos de la gente de HB y del periódico Gara y Berria. Les encanta eso de la dictadura del proletariado y de tener un enemigo poderoso a quien echarle la culpa de todo. Lástima que cien mil de ellos no se vayan a vivir a aquel paraíso y le ayuden a Fidel en sus zafras de caña y en consolidar una zarrapastrosa revolución donde lo único que funciona es la represión. Lo malo es que ese tipo de paraíso nos lo quieren imponer aquí. Y no lo lograría nunca con la gente de bien y la normal de este país, pero sí con los idiotas que piensan que lo de Cuba es una revolución al servicio del hombre.

Iñaki Anasagasti

Sobre este blog

Espacio de opinión de Canarias Ahora

Etiquetas
stats