Sobre este blog

Espacio de opinión de Canarias Ahora

Los prejuicios y los vecinos de Canarias

Canarias, al frente el Sáhara Occidental y más al noroeste, Marruecos.

1

En un supermercado de un barrio de Gran Canaria, la dependienta mira con desconfianza a dos chavales que acaban de entrar a comprar. No les quita ojo de encima y mira a otras clientas con el objetivo de encontrar complicidad mientras hace gestos de desaprobación. Los chicos que han entrado a comprar son de origen marroquí y una vez pagan, salen del establecimiento con sus compras en silencio. Ya en la calle mientras cuentan el dinero que llevan, pasan otros dos chicos del barrio, con la piel de color blanco y que con acento canario les chocan la mano y les dicen “¿que pasó chiquillos?”, un saludo de lo más típico en este Archipiélago africano. 

Es la doble cara de una misma estampa en Canarias: la de personas que se ponen en alerta ante prejuicios a los que tanto contribuyen los medios de comunicación y la de jóvenes que simplemente ven a otros jóvenes de los que hacerse amigos y compartir. En unos días en los que se deshumaniza a las personas hablando de números y no de historias, una puede escuchar multitud de opiniones en cualquier recóndito lugar de estas islas. Es como si las personas de origen marroquí y de otros puntos del continente no formaran ya parte de la sociedad isleña desde mucho antes de este último incremento de llegada de personas en pateras en condiciones precarias. 

Reparto, carpas, delincuencia, MENA, sobrecarga… son algunas de las palabras más pronunciadas en estas semanas en un país al que le escuece que le llamen racista. Hay dirigentes políticos que se aprovechan de la vulnerabilidad de algunas personas para radicalizar sus discursos, para fomentar el odio y el miedo y buscar un nicho de futuros votos. No les importan los motivos por los que emprenden el viaje más peligroso del mundo, ni cómo se sienten, ni que les pasa por la cabeza al perder a compañeros y seres queridos en el camino, ni si echan de menos a sus familias, ni qué quieren, ni qué les pone tristes, ni con qué sueñan…  

Incluso se atreven a tergiversar datos. En Canarias hay más de dos millones de habitantes. El Archipiélago ha ganado un total de 72.886 residentes desde 2014; en gran medida son peninsulares e italianos. Si hay un drama en estos momentos no es el de la supuesta llegada masiva de vecinos y vecinas, es que se produzcan muertes en el mar o que la gestión de la acogida no esté siendo lo digna que merecen estos jóvenes: hacinados y mirando al techo, sin nada que hacer: es la realidad que describen muchos de ellos; una manera de despojarles la esperanza. 

En un viaje que hice hace menos de un mes, lo que más nos preguntaban era si los habitantes mayoritarios en las Islas son marroquíes; una pregunta de lo más lógica teniendo en cuenta que vivimos literalmente al lado, que nos queda mucho más cerca que Europa y que pese a ello Canarias se ha empeñado en vivir de espaldas al continente al que pertenece, con el que guarda lazos muy fuertes y cuya población va a seguir llamando a su puerta mientras no se solucionen otros problemas estructurales y mientras las duras leyes de extranjería no permitan a sus habitantes viajar con un pasaporte como lo hacen otros miles de seres humanos que llegan a unas islas que siempre han sido punto de encuentro de culturas. 

Sobre este blog

Espacio de opinión de Canarias Ahora

Etiquetas
stats