El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Coladero en la Base Naval
Nos lo cuentan testigos presenciales, y sólo a ellos debemos la información, imposible de confirmar por los conductos reglamentarios (militares, por supuesto). Ocurrió recientemente en la Base Naval de Las Palmas, a cuyos pantalanes llegó en pleno día un alemán en una Zodiac. El navegante en cuestión recaló allí procedente de su velero, atracado en el Muelle Deportivo, para tratar de acercarse lo máximo posible a la zona comercial de Mesa y López. Como Pedro por su casa, el alemán atravesó andando todo el Arsenal sin que nadie le dijera ni mú. Realizó sus compras por la zona, se echó unas copitas y por la noche se dispuso a retornar a su yate, utilizando para ello el mismo procedimiento que le llevó hasta allí.
Nos lo cuentan testigos presenciales, y sólo a ellos debemos la información, imposible de confirmar por los conductos reglamentarios (militares, por supuesto). Ocurrió recientemente en la Base Naval de Las Palmas, a cuyos pantalanes llegó en pleno día un alemán en una Zodiac. El navegante en cuestión recaló allí procedente de su velero, atracado en el Muelle Deportivo, para tratar de acercarse lo máximo posible a la zona comercial de Mesa y López. Como Pedro por su casa, el alemán atravesó andando todo el Arsenal sin que nadie le dijera ni mú. Realizó sus compras por la zona, se echó unas copitas y por la noche se dispuso a retornar a su yate, utilizando para ello el mismo procedimiento que le llevó hasta allí.