Dicho un 4 de abril

Además de un par de cotorras a las que no se oye por hablar siempre a la vez, el programa El Patio tiene un digno equipo de redacción que se busca la vida para apañar temas de interés, mayormente sociales. Este lunes tocó el caso de una niña de 9 años afectada por una extraña enfermedad que la convierte en dependiente total. Y por ahí se enfocó el asunto y se lanzó el vídeo, pero cuando el realizador volvió a plató se cambiaron las tornas: no se habló de ley de dependencia y los presentadores llevaron a la madre de la afectada por los tradicionales vericuetos del amarillismo y del morbo para terminar incluso permitiéndole que hiciera un llamamiento a que la gente participe en los ventorrillos que la doña monta en las fiestas a ver si puede conseguir 10.000 euros para llevar a su niña a Cuba a que la vean unos especialistas. Pero cerró la presentadora con unas solemnes declaraciones pronunciadas un 4 de abril.

Además de un par de cotorras a las que no se oye por hablar siempre a la vez, el programa El Patio tiene un digno equipo de redacción que se busca la vida para apañar temas de interés, mayormente sociales. Este lunes tocó el caso de una niña de 9 años afectada por una extraña enfermedad que la convierte en dependiente total. Y por ahí se enfocó el asunto y se lanzó el vídeo, pero cuando el realizador volvió a plató se cambiaron las tornas: no se habló de ley de dependencia y los presentadores llevaron a la madre de la afectada por los tradicionales vericuetos del amarillismo y del morbo para terminar incluso permitiéndole que hiciera un llamamiento a que la gente participe en los ventorrillos que la doña monta en las fiestas a ver si puede conseguir 10.000 euros para llevar a su niña a Cuba a que la vean unos especialistas. Pero cerró la presentadora con unas solemnes declaraciones pronunciadas un 4 de abril.