Fin de etapa en la AECP

Tal y como les anunciábamos ayer, el calamitoso comunicado de la Asociación de Empresarios de la Construcción y la Promoción, fue inoportuno y un auténtico dislate. Durante su elaboración ya hubo abiertas discrepancias entre los rectores de la patronal, algunos de los cuales mostraron incluso su voto particular para que constara en acta. A otros se les interpretó su “me parece flojo” como un llamamiento a la desobediencia civil, cuando lo que en realidad dijeron al día siguiente es que “menuda metedura de pata”. Ahora sabemos que el comunicado contra las detenciones y “el circo mediático” fue producto de las presiones ejercidas por abogados de Santiago Santana Cazorla, deseosos de remedar el estilo Zerolo, consistente en crear un ambiente social propicio para convertir a su patrocinado en verdugo de una imposible operación política ejecutada por jueces, fiscales y policías. Y sabemos por qué decimos imposible.

Tal y como les anunciábamos ayer, el calamitoso comunicado de la Asociación de Empresarios de la Construcción y la Promoción, fue inoportuno y un auténtico dislate. Durante su elaboración ya hubo abiertas discrepancias entre los rectores de la patronal, algunos de los cuales mostraron incluso su voto particular para que constara en acta. A otros se les interpretó su “me parece flojo” como un llamamiento a la desobediencia civil, cuando lo que en realidad dijeron al día siguiente es que “menuda metedura de pata”. Ahora sabemos que el comunicado contra las detenciones y “el circo mediático” fue producto de las presiones ejercidas por abogados de Santiago Santana Cazorla, deseosos de remedar el estilo Zerolo, consistente en crear un ambiente social propicio para convertir a su patrocinado en verdugo de una imposible operación política ejecutada por jueces, fiscales y policías. Y sabemos por qué decimos imposible.