Paco González, en plan alternativa

Lo fácil en estos momentos es destapar la caja de los truenos, encender el ventilador y enfocar hacia todas partes en Mogán. Hay grandes asuntos y grandes investigaciones, policiales y periodísticas. Incluso corrió el rumor por el municipio que hasta él se habían acercado un par de redactores de la revista Interviú, y no precisamente para hacer un reportaje fotográfico de pieles bronceadas, sino para conocer de cerca el modo de operar que tienen algunos dirigentes políticos canarios. Les podemos asegurar que, de momento, no es así, que la revista aún no ha venido. El que sí se dejó caer en plan oficial por allí el jueves fue el consejero de Régimen Interior del Cabildo, Francisco González, a la sazón candidato in péctore del PP para optar a la alcaldía moganera. González lanzó todas las críticas que pudo y explicó los motivos del voto abstencionista que su grupo municipal opondrá a la moción de censura del próximo martes. Pudo haber ido más lejos y extender la sombra de la sospecha hacia todos lados, pero se detuvo donde creyó conveniente e hizo votos para que, a partir de la próxima legislatura, las cosas vuelvan a lo que debe ser normal en un Ayuntamiento civilizado. No son todos los que están dentro del consistorio; ni siquiera dentro del grupo de gobierno. Estamos en la obligación de decirlo porque a veces puede parecer que las maneras de unos pocos son las de todos. Y no. González se perfila como alternativa a la espera de que surjan otras. Que sea para bien.

Lo fácil en estos momentos es destapar la caja de los truenos, encender el ventilador y enfocar hacia todas partes en Mogán. Hay grandes asuntos y grandes investigaciones, policiales y periodísticas. Incluso corrió el rumor por el municipio que hasta él se habían acercado un par de redactores de la revista Interviú, y no precisamente para hacer un reportaje fotográfico de pieles bronceadas, sino para conocer de cerca el modo de operar que tienen algunos dirigentes políticos canarios. Les podemos asegurar que, de momento, no es así, que la revista aún no ha venido. El que sí se dejó caer en plan oficial por allí el jueves fue el consejero de Régimen Interior del Cabildo, Francisco González, a la sazón candidato in péctore del PP para optar a la alcaldía moganera. González lanzó todas las críticas que pudo y explicó los motivos del voto abstencionista que su grupo municipal opondrá a la moción de censura del próximo martes. Pudo haber ido más lejos y extender la sombra de la sospecha hacia todos lados, pero se detuvo donde creyó conveniente e hizo votos para que, a partir de la próxima legislatura, las cosas vuelvan a lo que debe ser normal en un Ayuntamiento civilizado. No son todos los que están dentro del consistorio; ni siquiera dentro del grupo de gobierno. Estamos en la obligación de decirlo porque a veces puede parecer que las maneras de unos pocos son las de todos. Y no. González se perfila como alternativa a la espera de que surjan otras. Que sea para bien.