Canarias Ahora Opinión y blogs

Sobre este blog

La portada de mañana
Acceder
Alemania toma el pulso a una extrema derecha envalentonada
La carpeta de Junts que atasca la mayoría de Sánchez
Opinión | Ya empezamos, por Antón Losada

El peligro de disparar al bulto

Al grito de marica el último, los más rancios echadores de cartas se han lanzado a la aventurada tarea de gritar a los cuatro vientos los nombres de las personas que supuestamente aparecen en las por ahora también supuestas listas de receptores de comisiones pagadas (y dale, también presuntamente) por Mauricio Hayek. Tenemos oído algún listado verdaderamente temerario, que el vocero que lo lanzó debe haber elaborado en un irresponsable ejercicio mañanero, con la resaca puesta, y aplicando el único criterio de su cada vez más tupido olfato. Meter nombres de gente de ATI por descarte, por simpatías, por antipatías, por aquella campaña de publicidad que no me pusiste o por lo mal que le caes a mi jefe, es tanto como soltar la balacera y al que le toque, que se aguante. Hay muchas más posibilidades de equivocarse que de acertar cuando se dispara al bulto. Y puede que cuando se vaya a corregir el tiro sea demasiado tarde.

Al grito de marica el último, los más rancios echadores de cartas se han lanzado a la aventurada tarea de gritar a los cuatro vientos los nombres de las personas que supuestamente aparecen en las por ahora también supuestas listas de receptores de comisiones pagadas (y dale, también presuntamente) por Mauricio Hayek. Tenemos oído algún listado verdaderamente temerario, que el vocero que lo lanzó debe haber elaborado en un irresponsable ejercicio mañanero, con la resaca puesta, y aplicando el único criterio de su cada vez más tupido olfato. Meter nombres de gente de ATI por descarte, por simpatías, por antipatías, por aquella campaña de publicidad que no me pusiste o por lo mal que le caes a mi jefe, es tanto como soltar la balacera y al que le toque, que se aguante. Hay muchas más posibilidades de equivocarse que de acertar cuando se dispara al bulto. Y puede que cuando se vaya a corregir el tiro sea demasiado tarde.