El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Quién quiere el campo de Bandama
Nos llegan noticias de esos sures de Dios, a veces tan excesivamente alejados de las cosas que pasan en la corte de Pepa Luzardo, presa de Soria para casi todas las cosas de interés. De esos sures nos llega, por ejemplo, la imposibilidad de Eustasio López, dueño máximo de Lopesan, de sentarse el otro día con Isidoro Álvarez, dueño y señor de El Corte Inglés. Dicen personas allegadas a López que no comió con él y que no sabía que había venido a Gran Canaria. Será. Pero de Lopesan nos llegan también noticias referidas al campo de golf de Bandama, ese que Soria ha de rescatar a final de año le guste o no la idea. Tampoco interesa a la empresa sureña ese golf porque -aseguran- con el de Mapalomas y con el que está a punto de terminar en Meloneras, va más que sobrado. Otra cosa es que le interese por caché, pero de eso mejor no hablamos ahora, que es asunto delicado.
Nos llegan noticias de esos sures de Dios, a veces tan excesivamente alejados de las cosas que pasan en la corte de Pepa Luzardo, presa de Soria para casi todas las cosas de interés. De esos sures nos llega, por ejemplo, la imposibilidad de Eustasio López, dueño máximo de Lopesan, de sentarse el otro día con Isidoro Álvarez, dueño y señor de El Corte Inglés. Dicen personas allegadas a López que no comió con él y que no sabía que había venido a Gran Canaria. Será. Pero de Lopesan nos llegan también noticias referidas al campo de golf de Bandama, ese que Soria ha de rescatar a final de año le guste o no la idea. Tampoco interesa a la empresa sureña ese golf porque -aseguran- con el de Mapalomas y con el que está a punto de terminar en Meloneras, va más que sobrado. Otra cosa es que le interese por caché, pero de eso mejor no hablamos ahora, que es asunto delicado.