Diez organizaciones ecologistas, contrarias a la renovación de centrales térmicas en Canarias

Diez organizaciones sociales y ecologistas se han mostrado contrarias a la renovación de centrales térmicas en Canarias, ya que creen que pone en grave riesgo la consecución de lo establecido por el Consejo de Ministros donde se señaló que “la contribución en el mix eléctrico de las centrales de combustible fósil ubicadas en las Islas Canarias en el año 2030 se reducirá al menos un 50% respecto de la situación actual”, indican los ecologistas en un comunicado.

El pasado 21 de junio fue firmada por parte de la secretaria de Estado de Energía, la resolución por la que se convoca el procedimiento de concurrencia competitiva para el otorgamiento favorable de compatibilidad a efectos del reconocimiento del régimen retributivo adicional para los sistemas eléctricos de los territorios no peninsulares.

Las asociaciones explican que este acuerdo significa que “se da el pistoletazo de salida” para la instalación de nuevos grupos térmicos de combustibles fósiles en la generación eléctrica de Canarias, Baleares, Ceuta y Melilla.

Los ecologistas denuncian que esta resolución a nivel estatal conlleva que la retribución de los nuevos grupos se haga mediante la retribución adicional, “lo que supone unos cuantiosos beneficios para aquellos promotores que se encarguen de estas instalaciones para su futura explotación. Además, añaden, se les asegura esa retribución mientras dure su vida útil regulatoria, que, en este caso, cuentan, ”se alarga hasta los 25 años“.

Consideran que en el momento más favorable, podrá estar acoplados a la red en torno a 250 MW de eólica y fotovoltaica, “cantidad que ya, en la actualidad, se puede superar sobradamente”. En este sentido, advierten que en un escenario donde la “gestionabilidad” la proporcionen grupos térmicos de combustibles fósiles, la penetración de renovables será “como mucho del 50%” y por tanto, los empresarios que inviertan en instalaciones renovables que superen esas cantidades, estarán expuestos a los a los “temibles vertidos energéticos que conllevará a la pérdida de ingresos”.

Creen que el Gobierno de Canarias no ha apostado, en el procedimiento para dotar nuevos grupos térmicos, por un modelo “ecológico, independiente y con gran valor añadido para el medio ambiente”, los denunciantes lo clasifican como un “modelo pedigüeño, subvencionado, altamente contaminante y que simplemente va a destinar los ingentes recursos necesarios, a empresas energéticas que solo buscan el lucro financiero”.

Las organizaciones que se han sumado a esta denuncia son Greenpeace, Federación Ben Magec Ecologistas en Acción, SOS Fuerteventura Sostenible, Salto a la Transición ecológica, Asociación para la Transición Energética, Transparencia Urbanística, La Colectiva, Salud y Sonrisas, Los Tarahales Reacciona y Yuvaika.