MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
La película 'La isla interior' narra la vida íntima de una familia, su lucha por la supervivencia a la herencia que arrastran desde su origen y el miedo permanente a la locura.
El filme, escrito y dirigido por Dunia Ayaso y Félix Sabroso ('Perdona bonita, pero Lucas me quería a mí', 'Los años desnudos' y 'El grito del cielo', entre otras), se estrena en los cines el próximo viernes.
Gracia, Martín y Coral son tres hermanos, perdidos y desorientados, con unos problemas muy similares aunque con vidas muy diferentes, que luchan por salir adelante y ser felices. Por un lado, Martín quiere abandonar la casa de sus padres para escribir en París; Gracia quiere separar la realidad de la ficción en la que se ha convertido su vida; mientras que Coral sólo quiere que la quieran.
En esta situación de huída y miedo, en la que todos se dan la espalda y nadie ayuda al otro, se encuentran los tres hermanos cuando les informan acerca de la inminente muerte de su padre, un hecho que les obligará a enfrentarse entre ellos y a ellos mismos para superar los obstáculos que les impiden llevar a cabo sus deseos.
El filme, localizado en la isla de Gran Canaria y protagonizado por Candela Peña, Alberto San Juan, Cristina Marcos, Geraldine Chaplin, Celso Bugallo y Antonio de la Torre, es, según señalaron los directores hoy en su presentación, una película “muy personal”, aunque no se trata de una historia autobiográfica.
En palabras de Sabroso, “hablamos de forma general sobre el lastre que supone la herencia familiar y cómo tenemos que realizar el dibujo de nuestras propias vidas, teniendo en mente que el principal obstáculo es lo que hemos heredado”. Aunque el drama y la dureza está presente en este largometraje, el director precisó que “no es una película para sufrirla, sino para identificarse con ella”.
Según explicó, “la película comienza con el miedo de los hijos a heredar la esquizofrenia que sufre su padre aunque, a medida que las escenas avanzan, se observa el peso del papel de la madre, de la educación que han recibido sus hijos y de su incapacidad para madurar y ser independientes”.
TERAPIA DE GRUPO E INTENSIDAD DIARIA
Respecto a la realización de la película, Ayaso señaló que los ensayos fueron una especie de “terapia de grupo”, ya que en los primeros encuentros todo el mundo necesitaba contar su experiencia personal, lo que supuso una “intensidad diaria” durante el tiempo que duró este rodaje.
En este sentido, Alberto San Juan indicó que el tema que aborda la película “lo conocemos todos: la familia y la comunicación”. “No había que trasladarse para buscar información, porque cada uno tiene su propia experiencia familiar en la que puede encontrar situaciones similares”, dijo.
Por su parte, Cristina Marcos advirtió que “la familia no es un nido de amistad, es otra cosa, y esto está muy bien retratado en la película”. “Las familias son junglas que a veces están en paz y otras veces no”, señaló.
Candela Peña subrayó que ha sido una experiencia llena de “tensiones y nervios”, para la que han esperado cerca de cuatro años, aunque matizó que, a pesar de la dureza, todos reconocieron que este ha sido “uno de los mejores rodajes que han pasado en sus vidas”. Según indicó, esta película refleja lo que ocurre en la vida: “la infancia determina lo que ocurre en la existencia de cada uno, y hay gente que cura heridas y otros que no lo consiguen”.
De la misma forma, Geraldine Chaplin, que encarna el papel de madre francesa, sobria y rígida en la forma de educar a sus hijos, calificó la experiencia como “extraordinaria y dura”, en la que se contaron los unos a los otros “secretos guardados en el armario sus familias”.