La banda británica Jamiroquai no decepcionó a las alrededor de 17.000 personas que, según fuentes de la organización, acudieron este viernes al habilitado nuevo recinto de conciertos de Siete Palmas, junto al estadio de Gran Canaria. La noche festivalera la completaron el canario Arístides Moreno y las bandas El canto del loco y Calle 13.
La actuación más esperada cumplió con las expectativas. La banda británica, con un siempre inspirado Jay Kay de maestro de ceremonias, enganchó desde la primera canción con un público que echaba en falta un poco más de potencia sonora y menos espera entre actuación y actuación.
La organización apostó por un festival ecléctico que sirviera para que los seguidores de El canto del loco salieran satisfechos con su actuación y los de Jamiroquai bailaran de lo lindo al ritmo de las más conocidas composiciones del grupo. Había para casi todo el mundo.
Funcionó bien el nuevo recinto de Siete Palmas, habilitado por la productora La Luciérnaga como espacio para conciertos después de que quedaran rechazadas sus pretensiones de utilizar el estadio de Gran Canaria, comprometido para otros acontecimientos. Esta explanada, de unos 20.000 metros cuadrados, demostró valer para este tipo de acontecimientos multitudinarios si se cumple con los preceptos legales. No se registradon aglomeraciones especialmente incómodas ni problemas de tráfico relevantes.