El Estrasburgo asalta el fortín del Granca

El Herbalife Gran Canaria ha visto cómo el Estrasburgo francés asaltaba su fortín por 76-85 en una cancha donde los aficionados no habían visto perder a su equipo desde febrero de 2011 en el marco de la competición europea.

Los visitantes llegaban al castillo amarillo armados con una fortaleza física envidiable y su general Collins a la cabeza, quien promedió 21 puntos, 7 rebotes, 3 asistencias y 28 de valoración.

La defensa amarilla fue buena hasta el final del primer cuarto. Desde ese momento pareció desactivarse el equipo de Aíto. No encontraba la manera de evitar los ataques de los franceses y el acierto desde el exterior se quedó en un 17%.

El mejor del Herbalife fue Seeley (22 puntos y 17 de valoración) en un partido donde Omic se quedó en 10 puntos y nueve de valoración, desactivado totalmente por la defensa francesa y Pangos no acabó de encontrar la llave (11 puntos, 6 asistencias y 13 valoración).

Ante tal dinámica los amarillos lo intentaron hasta el tercer cuarto, cuando veían que a pesar de sus esfuerzos los visitantes seguían anotando una y otra vez y ampliando su ventaja. En ese momento ya bajaron los brazos y ni el aliento de los aficionados del Gran Canaria Arena (mudo en el último cuarto) pudo ayudar a los locales.

Y eso que arrancaba bien el Granca en casa. Seeley abría la lata con un triple pero enseguida tendría la réplica de Beaubois. Los amarillos comenzaban con una buena defensa, firme y cosechando los rebotes con rápidas transiciones al ataque para poner un 13-5 en el marcador que daba muy buenas vibraciones.

Pero los cambios en el equipo francés tornaban las riendas del encuentro. En la recta final del primer cuarto al Estrasburgo conseguía neutralizar a los amarillos y le dieron la vuelta al marcador y al partido.

Como un espejo, los franceses calcaron al Granca con rápidas transiciones y consiguiendo ser líderes en rebotes en ataque y atrás para irse al segundo cuarto con cinco de ventaja (21-26) gracias al liderazgo de Collins.

Pintaba mal. Leloup ampliaba ventajas en el segundo cuarto hasta los ocho puntos de diferencia (23-31), castigando a un mal Granca que se veía sin ideas en ataque.

La reacción llegaba gracias a los rebotes ofensivos de la mano de Seeley y Pablo Aguilar. Se recortaban distancias (29-33) pero los amarillos abusaban de un tiro exterior que no entraba hasta que el escolta estadounidense demostró su maestría en triples para llegar a los 10 puntos.

Se desatascaba el Herbalife a pesar del poco acierto en el tiro, algo en donde los franceses gozaban de mayor fortuna. Volvía Leloup a disparar de tres y los suyos mantenían una ventaja de cinco puntos (31-36) al ecuador del segundo cuarto.

Collins, inconmensurable, se internaba con gran facilidad en una blanda defensa amarilla y seguía manteniendo la ventaja para los suyos a tres minutos del final (34-38), aunque poco a poco parecía que los locales iban acercándose gracias a un Kevin Pangos que parecía enchufarse al partido con un triple (37-38).

Pero entre Collins (15 puntos y 4 rebotes al descanso que le daban 18 de valoración), Duport y Lacombe (los tres por encima de los 10 puntos de valoración al descanso) conseguían dejar a los suyos por delante (38-43) al final del segundo cuarto.

Los franceses superaron en todo al Herbalife, en el que sólo Xabi Rabaseda(que cuajó un gran inicio) llegaba a superar la decena en valoración con 11 puntos, algo que ilustraba el pobre acierto de los de Aíto a pesar de lograr la igualdad en el marcador en el segundo cuarto (17-17).

El Estrasburgo seguía con la misma tónica tras el descanso. A pesar los esfuerzos de los locales por recortar distancias, los franceses parecían más altos, más fuertes y más rápidos. Beaubois acertaba de tres (40-48) y lo ponía más difícil.

Los de Aíto se mantenían vivos, pero daba la sensación que constantemente a remolque, pues cuando parecía que podían acercarse, los franceses contestaban rápido y de forma contundente.

Las rápidas transiciones con Collins (21 puntos y 33 de valoración en el tercer cuarto) y Beaubois hacían mucho daño a los amarillos, impotentes ante sus internadas.

A pesar de los intentos del Granca, los franceses conseguían agrandar su ventaja hasta los 15 puntos (53-68) al final del tercer cuarto. En los minutos finales se palpaba que los jugadores amarillos ya bajaban los brazos ante la contundencia de los visitantes (63% de acierto de dos y 40% en triples) que cuajaban un parcial de 15-25.

El último cuarto se jugaba en el mutismo absoluto del Gran Canaria Arena, que asistía impávida a una derrota que parecía inevitable. Pero los amarillos esta vez no decidieron bajar del todo los brazos y daban esperanzas de la mano de Seeley, que ponía el 75-83 a 54 minutos del final.

Pero los franceses, a pesar de la relajación en su juego en el último cuarto, no iban a permitir dejar escapar la victoria y abrieron una grieta en el fortín amarillo por 76 a 85, quienes lucharon hasta el pitido final.