FRANCFORT (ALEMANIA), 11 (EUROPA PRESS)
El Banco Central Europeo (BCE) espera que la economía de la zona del euro experimente un crecimiento “moderado” en 2010, aunque advierte de que es probable que el ritmo de la recuperación sea “irregular” por las expectativas de un “ligero aumento del desempleo” en la zona euro, que frenaría el crecimiento del consumo.
La última edición del boletín mensual del BCE apunta que la zona del euro se ha beneficiado de un cambio en el ciclo de existencias y de una recuperación de las exportaciones, así como de las significativas medidas de estímulo macroeconómico aplicadas, pero alerta de que estos factores de estímulo “son de naturaleza temporal.
Respecto a la inflación, el informe señala que el Consejo de Gobierno de la entidad espera que la estabilidad de precios se mantenga a medio plazo, respaldando el poder adquisitivo de los hogares de la zona del euro. “Las expectativas de inflación a medio y a largo plazo siguen firmemente ancladas en niveles compatibles con el objetivo del Consejo de Gobierno de mantener la inflación en tasas inferiores, aunque próximas, al 2% a medio plazo”, señala.
Asimismo, el BCE sugiere que como reflejo de la débil recuperación de la demanda en la zona del euro y en otros países, es previsible que siga observándose gran contención en la evolución de precios, costes y salarios.
Por otro lado, el BCE advierte de que muchos países de la zona del euro se enfrentan a “fuertes desequilibrios presupuestarios en rápido crecimiento”, que generan el riesgo de tipos de interés a medio y a largo plazo menos favorables y descensos de la inversión privada.
Así, la institución emisora de la eurozona advierte de que los elevados niveles de déficit y deuda pública representan una carga adicional para la política monetaria y desacreditan la función del Pacto de Estabilidad y Crecimiento como pilar fundamental de la Unión Económica y Monetaria.
“De conformidad con el procedimiento de déficit excesivo, se exigirá a todos los países que cumplan los compromisos adquiridos. El saneamiento de las finanzas públicas deberá comenzar en 2011 a más tardar y tendrá que exceder sustancialmente el ajuste anual del 0,5 del PIB establecido como requisito mínimo en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento”, concluye el informe.