El portavoz del Gobierno de Canarias, Martín Marrero, se ha mostrado este jueves “convencido” de que el nuevo impuesto a las grandes superficies no va a destruir empleo, aunque ha admitido que los empresarios “están en su derecho” de plantear un recurso judicial.
En una rueda de prensa celebrada tras el Consejo de Gobierno, ha comentado que ya se aplica en otras Comunidades Autónomas y que la previsión de ingresos para este año es de 4 millones frente al recorte general procedente del Estado de 814 millones.
“Se está produciendo una fiebre por la que cada vez que se va a tomar una medida se evalúa en despidos. No se puede ser pitoniso, y los empresarios tendrán que demostrar que los despidos se producen por la aplicación del impuesto. Si los hay, no será por el impuesto. Es fácil lanzar cifras al aire y repartir culpabilidades”, ha subrayado.