El Puerto de Arinaga empieza a despegar tras diez años de retrasos y polémicas
Tras casi una década con un nivel de uso muy por debajo de su capacidad, el Puerto de Arinaga ha mostrado mayor actividad durante los dos últimos años, espantando los fantasmas de una posible devolución de los fondos europeos invertidos en su construcción. El movimiento de carga ha crecido y varias iniciativas de peso han obtenido concesiones para instalarse en el puerto.
En una entrevista con Canarias Ahora, el alcalde de Agüimes, Óscar Hernández (Roque Aguayro), se ha mostrado convencido de la consolidación del puerto como una infraestructura importante para el desarrollo de su municipio, pero reconoce que aún están esperando a que los proyectos se “transformen en realidades”.
En los últimos dos años, la actividad se ha multiplicado. El total de mercancías movidas a través del Puerto de Arinaga ha pasado de 50.000 toneladas en 2015 a 154.000 en 2016, y este año los datos acumulados hasta mayo muestran un incremento de casi un 22% respecto al curso anterior.
Sin embargo, este alto índice de crecimiento parte de un nivel de uso extremadamente bajo. En 2016, el Tribunal de Cuentas de la Unión Europea publicó un informe que cuestionaba la eficacia de la inversión de fondos europeos en el Puerto de Arinaga debido al poco tráfico que tenía. Aunque el documento reconocía un “modesto aumento de las actividades” respecto a la anterior auditoría de 2010, el organismo europeo declaraba que esta infraestructura estaba infrautilizada con una explotación por debajo del 10% de su capacidad.
Los informes negativos emitidos por del Tribunal de Cuentas amenazaban con forzar la devolución de los cerca de 11 millones de euros de fondos europeos invertidos en el puerto. Hernández asegura que la presión desde Bruselas ha facilitado la “mayor disposición de la Autoridad Portuaria” para desarrollar Arinaga, causando en parte la reciente mejora del rendimiento del puerto.
El alcalde señala que los recientes datos de crecimiento evidencian que “la actividad del puerto comienza a consolidarse” y confía en que sea suficiente para demostrar de cara a Europa su importancia como “infraestructura básica para la dinamización de la economía”. “El riesgo de la obligación de devolver las subvenciones a Europa ha desaparecido,” asegura.
Hernández acusa a las élites empresariales del Puerto de la Luz de haber ralentizado el desarrollo de Arinaga. “El Puerto no se ha desarrollado con mayor intensidad de trabajo porque a los lobbys empresariales de la capital y el entorno no les interesaba que se desarrollara Arinaga. Lo veían como un puerto competitivo que les podía quitar su posición de influencia en la Autoridad Portuaria,” sentencia.
Hernández cree que el desarrollo solo se ha desatascado porque los grandes empresarios de la isla han comprobado que se pueden posicionar con ventaja en Arinaga para aprovechar el futuro crecimiento económico de la zona. Argumenta que la compra y alquiler de naves en el Polígono por parte de grandes empresarios capitalinos como Satocan y Germán Suárez demuestra el creciente interés por la actividad alrededor del puerto.
El primer edil confía en que los proyectos de inversión den mayor impulso al desarrollo del puerto. La sociedad Gran Canaria Subsea & Offshore Base SL ha recibido una concesión de 92.431 metros durante 28 años en la zona franca para construir una zona de servicios a plataformas petrolíferas. También se ha aprobado un permiso a Petrosigma para instalar una planta de almacenamiento de combustible y otro a Yesos Canarios para almacenar cargas a granel.
La Autoridad Portuaria cree que estos proyectos podrían llegar a ocupar el 100% de la capacidad del puerto, pero Hernández quiere ver resultados y asegura que a día de hoy en la zona franca sigue habiendo más de 250.000 metros cuadrados “muertos de la risa”.
Proyectos de innovación ecológica
El Puerto de Arinaga es también el escenario de varios proyectos de innovación ecológica. A principios de año, la Autoridad Portuaria autorizó al Cabildo de Gran Canaria la instalación de dos aerogeneradores en sus aguas. En junio, el Ministerio de Fomento desafectó 72.000 metros cuadrados del dominio público portuario para que Cabildo construya un centro de investigación de biotecnología azul en Arinaga.
Según Hernández, estas inversiones impulsarán la economía de Agüimes y ayudarán a reducir el paro. El alcalde explicó que el Ayuntamiento facilitará la contratación de trabajadores del municipio creando listas de vecinos con perfiles adecuados a las necesidades de cada proyecto. Además, se mostró especialmente interesado en la generación de empleo en sectores innovadores porque opina que “ofrecen garantías de futuro”.
El regidor asegura también que se ha puesto fin a los proyectos peligrosos para el medioambiente. Según Hernández, no hay licencias para ninguna actividad de desguace y el Consistorio ha acudido a la Fiscalía para denunciar a aquellos que han operado de manera irregular. El alcalde recalcó que además de estar en un área industrial, el Puerto de Arinaga está rodeado de un núcleo poblacional de una zona de gran riqueza natural, y que “de ninguna manera [van] a permitir que Arinaga se convierta en el vertedero de la isla”.
Respecto a la polémica instalación de una central regasificadora en el puerto, Hernández afirma que “queda descartada la posibilidad de implantación” debido a “la inversión necesaria, la dificultad administrativa y el rechazo municipal, insular y comarcal”. Aunque desde el Gobierno Central se insista en la implantación del gas en los puertos canarios, el Consistorio local ha rechazado de forma reiterada la central en Arinaga. Desde Agüimes se apoya la decisión del anterior alcalde y ahora presidente del Cabildo Insular, Antonio Morales, de abandonar la idea del gas y promover la implantación de las energías renovables.
