La subida de los tipos frenan el crecimiento económico en el segundo trimestre

La economía española creció un 4% en el segundo trimestre, una décima por debajo del crecimiento registrado durante los tres primeros meses del año, debido al menor empuje de la demanda interna, que está afectada por la subida de los tipos de interés, según las Cámaras de Comercio.

En su Boletín de Situación Económica, las Cámaras señalan que el consumo de los hogares está reduciendo su tasa de crecimiento, lo que también ocurre con la inversión “el componente más dinámico de la demanda nacional”, debido, principalmente a la construcción.

La demanda externa mantiene una aportación negativa al crecimiento inferior a un punto porcentual, apunta el boletín. Las exportaciones continúan aprovechándose del ritmo de expansión del que disfruta la economía europea, mientras que las importaciones se estancaron por la menor fuerza del consumo.

Por sectores, la construcción mantiene la tendencia de desaceleración que comenzó en trimestres anteriores, aunque las obras públicas pueden compensar el menor crecimiento de las viviendas, a la vez que la industria avanza de manera “sólida” y los servicios reflejan el menor dinamismo del consumo.

En cuanto al menor ritmo de crecimiento en el empleo que se registró en junio, (en abril y mayo el número de parados descendió a tasas próximas al 2%, frente al más del 4% del primer trimestre) las Cámaras lo achacan al cambio de patrón sectorial, con un mayor peso de la industria y menor en sectores que utilizan mucha mano de obra, como la construcción.

Con respecto a la inflación, el aumento en junio de una décima de la tasa interanual hasta situarla en el 2,4%, se debió, según el boletín, al precio del petróleo, que llegó a los 71,14 dólares el barril, su mayor registro desde agosto de 2006.

Las Cámaras prevén que para el tercer trimestre el crecimiento de la economía española mantendrá la moderación y la situación no será muy diferente de la actual, con un menor impulso de la demanda nacional y un comportamiento “algo mejor” del sector exterior.

No obstante, el menor crecimiento previsto será “más sano”, porque se basará en la industria, en la inversión en bienes de equipo y el sector exterior, lo que implicará mejoras en la productividad y en la competitividad.