El enfermero condenado por la Audiencia de Las Palmas a 23 años de cárcel por envenenar en 2010 a su mujer con talio, barbitúricos y otros medicamentos, recurrirá la sentencia del alto tribunal canario que confirma el fallo dictado en primera instancia y le prohíbe comunicarse con su hijo durante 33 años.
Según ha informado el abogado del enfermero, José Álvarez, la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias “no tiene ni pies ni cabeza” y además no resuelve ninguna de las cuestiones que presentó en su recurso de apelación de cerca de 500 folios.
Álvarez ha lamentado que la sentencia del TSJC, que aún no ha sido difundida por el gabinete de prensa del alto tribunal canario, conteste a su recurso con 33 páginas “con muchísimo relleno”.
La sentencia, que fue difundida este martes por el periódico Canarias 7, fue notificada al abogado de la acusación particular, ejercida por Acenk Galván, quien representa los intereses de los padres de la víctima, la también enfermera Laura A.G., que son los abuelos maternos del único hijo que tenía la pareja, que es menor de edad, y quienes tienen su patria potestad, también por decisión de la justicia .
Galván ha celebrado la decisión del TSJC por confirmar la pena impuesta al acusado de 23 años y por añadir la petición que formuló para que se prohibiera la comunicación y el contacto al acusado con su hijo durante el tiempo de la condena y diez años más.
El abogado de la acusación particular ha indicado que a la petición que formuló de incomunicación del acusado con su hijo se adhirió el Ministerio Público, al tiempo que ha señalado que la sentencia dictada por la Audiencia de Las Palmas no recogía ningún tipo de prohibición en la comunicación del acusado con su hijo.
Para Galván, era de “justicia” que se incomunicara al acusado con su hijo, con el que mantenía comunicación telefónica cuando el menor se hallaba con sus abuelos paternos, pues cuando este niño sea mayor se enterará que su padre mató a su madre.
“Este padre se acabó para este niño”, quien ahora tiene como padres a sus abuelos maternos, ha declarado Galván.