Las entidades dedicadas a la exploración, investigación y explotación de yacimientos y almacenamientos subterráneos de hidrocarburos pasarán a tributar al 30% en el Impuesto de Sociedades en el año 2016, cuando se aplique totalmente la reforma fiscal del Gobierno, tras reducirse el tipo en cinco puntos.
Así consta en el proyecto de ley del Impuesto de Sociedades que el Consejo de Ministros aprobó el pasado 1 de agosto y que se tramitará en el Congreso a partir de septiembre con el objetivo de que entre en vigor el 1 de enero de 2015.
Por lo tanto, la compañía petrolera Repsol podrá beneficiarse de esta rebaja fiscal en las prospecciones que tiene previsto empezar en el último trimestre del año frente a las costas de Lanzarote y Fuerteventura.
El presidente de Repsol, Antonio Brufau, señaló recientemente que los trabajos comenzarán a finales de 2014 en en el emplazamiento conocido como Sandía, un punto del océano situado a aproximadamente 60 kilómetros de las costas de Fuerteventura, donde su barco perforador, “de séptima generación”, deberá atravesar 885 metros de agua antes de llegar al lecho marino.
En la reforma fiscal que prepara el Gobierno, según recoge Europa Press, se prevé una reducción del tipo impositivo general del Impuesto de Sociedades del 30% al 28% en 2015 y hasta el 25% en 2016. Es decir, una caída de cinco puntos, el mismo porcentaje en que caerá el tipo para las entidades del sector de los hidrocarburos, que al partir de un tipo del 35% tributarán al 33% el año próximo y al 30% en 2016.
No obstante, a este tipo de actividades de exploración, sondeo o prospección de minerales e hidrocarburos no les serán de aplicación las deducciones previstas en el mismo proyecto de ley para la investigación, el desarrollo y la innovación tecnológica.