Regional, intergeneracional, representativa de unos 2.000 militantes –la suma de los avales de ambos– y ajena al aparato. Poco más o menos, y en palabras de Gustavo Matos, ese es el resultado de la suma de fuerzas que presentó este martes con la consejera de Empleo del Gobierno de Canarias, Francisca Luengo, quien ha decidido brindarle su apoyo después de no lograr las firmas suficientes para concurrir por su cuenta a las primarias del PSOE a la Presidencia del Ejecutivo autonómico.
En un ambiente de acuerdo de cierta relevancia y después de un cambio de última hora en la ubicación de la comparecencia de prensa por las obligaciones parlamentarias de Luengo, Matos afirmó que era un día de “alegría y de emoción”. “He trabajado con Paquita durante año y medio y sé cómo es: una persona trabajadora, leal y un valor que debe cuidar el PSOE”, señaló el actual director general de Comercio.
El político lagunero explicó que han decidido unirse porque ambos creen que el Partido Socialista debe superar cuestiones que tienen que ver con la territorialidad y que buscan transmitir una idea de región. También, sostuvo, esta candidatura es “de los socialistas canarios” y una apuesta por una forma de hacer política “más cercana”. Y fue más allá: “Estas no son unas primarias a la Vicepresidencia del Gobierno; no hacemos política con una calculadora en la mano”.
“¿Por qué con Gustavo y no con otras candidaturas?”, se había preguntado previamente Francisca Luengo, que abrió la rueda de prensa. “Vimos que la que más se acercaba al proyecto de Paquita Luengo era la de Gustavo Matos”, apuntó la consejera, que definió el acuerdo como “importante” para el Gobierno de Canarias y para la política. Además, incidió sobre una idea planteada por el candidato: “Yo no represento a ninguna familia; muchos militantes consideran que no es el momento de las familias”.
Luengo, que dijo conocer “sobradamente” a Matos, manifestó que son dos personas “completamente distintas”, pero también un “tándem perfecto” para lo que necesita el partido. El objetivo de este entente, según expuso, es que quienes ven en ella un “proyecto distinto” apoyen a Gustavo Matos, el candidato que, a su juicio, dispone de la opción “de mayor implantación regional”.
Polémica con los avales
Aunque la consejera llegó a decir en algún momento que no quería que pareciese que se estaba “sacando espinitas”, dedicó buena parte de sus intervenciones a mostrar su descontento con los avales que consiguió y que, finalmente, no fueron contabilizados. En este sentido, criticó que, tras presentar un recurso, se hayan vulnerado las normas y los plazos de respuesta, así como que la Comisión Regional de Garantías ha sido “más de recuento que de garantías del procedimiento”. Y precisó que será la Federal la que, finalmente, resuelva su alegación.
Por otra parte, Gustavo Matos opinó que el proceso de primarias abiertas legitimará al PSOE para hablar de regeneración política en Canarias, y aprovechó para hacer un llamamiento a los ciudadanos para que se sumen a una iniciativa que hará que esta formación política parta en los comicios con “ventaja democrática”. Asimismo, se mostró partidario de un debate entre las distintas opciones, hasta el punto de que, detalló, le hubiera gustado que se celebrase incluso antes del proceso de avales.
Luengo también subrayó que su decisión de intentar ser candidata a las primarias llegó tras el anuncio del secretario general regional, José Miguel Pérez, de no presentarse, toda vez que no iba a competir contra él. Ese hecho derivó en que tuviese “escasamente” doce días para recoger apoyos. Debido a ello, según expresó, nunca tuvo en mente pactar ni un plan B.