Golpe militar en Honduras

El presidente hondureño, Manuel Zelaya, ha sido detenido por soldados hondureños siguiendo presuntamente una orden judicial que habría ilegalizado la consulta popular que el dirigente había convocado para este domingo, según informaron fuentes de las Fuerzas Armadas al diario El Heraldo.

Según las primeras informaciones, Zelaya había sido sacado del palacio presidencial en Tegucigalpa a las 06.00 de la mañana (hora local) por cuatro comandos del Ejército Nacional Hondureño -unos 200 soldados- que procedieron a trasladarle a una base aérea y, desde allí, a Venezuela o Costa Rica, según medios latinoamericanos.

Enrique Reina, secretario privado del presidente, confirmó la detención de Zelaya y aseguró que mantendrá comunicación con el cuerpo diplomático acreditado en Honduras para evitar un golpe de Estado. “Se llevaron al presidente de su casa militares para la fuerza aérea. Estamos haciendo la denuncia internacional”, dijo el secretario en declaraciones recogidas por la Radiocadena Voces.

De momento, el palacio presidencial sigue rodeado por las fuerzas de seguridad hondureñas y se está informando de enfrentamientos entre militares y manifestantes en el municipio hondureño de La Lima. El canal Noticias24 informa igualmente de la suspensión del servicio eléctrico en gran parte del país.

Una fuente de las Fuerzas Armadas confirmó al diario hondureño El Heraldo que la detención de Zelaya fue una orden de los tribunales de la República ante un “acto ilegal consumado”, en referencia al referéndum consultivo que este domingo se lleva a cabo. Igualmente, según el mismo medio, el Ejército ha comenzado a incautar material electoral en diversos municipios del país centroamericano.

Primeras reacciones

El presidente venezolano Hugo Chávez, amigo y aliado de Zelaya, compareció inmediatamente en los medios para denunciar la detención del dirigente hondureño, que calificó de “golpe de estado troglodita”. Al mismo tiempo, la Organización de Estados Americanos (OEA) anunciaba la convocatoria de una reunión de emergencia para abordar la crisis en Honduras.

En declaraciones a la cadena Telesur, el presidente venezolano instó al presidente estadounidense, Barack Obama, a que se pronuncie de inmediato sobre este “atropello contra Honduras y los pueblos de América Latina”.

“Quiera Dios que esos soldados no vayan a arremeter con esos fusiles contra su propio pueblo”, añadió el presidente Chávez. “Detrás de los golpistas... está la burguesía hondureña (...) los ricos, los que convirtieron a Honduras en una República Bananera”.

“No es un atropello sólo contra Honduras sino contra todos los pueblos de América Latina”, añadió Chávez, que aseguró que “este golpe va a ser derrotado y que ”la movilización ya ha comenzado“ desde Venezuela.