La activista saharaui Aminatou Haidar ha llegado a El Aaiún (Sáhara Occidental) en el avión que despegó de Lanzarote, según ha informado Carmelo Ramírez, portavoz de la Plataforma de Apoyo Aminatu Haidar.
La confirmación de la llegada del avión ha sido posible gracias a una llamada que el médico de Aminatu Haidar, Domingo de Guzmán Pérez Hernández, ha hecho a su mujer en Lanzarote, ha explicado Ramírez.
Según Carmelo Ramírez, presidente de la Federación Estatal de Instituciones Solidarias con el Sáhara de España, el avión ha llegado en principio “sin contratiempos”.
El avión que traslada a El Aaiún a la activista saharaui Aminatou Haidar, tras 32 días en huelga de hambre, despegó del aeropuerto de Lanzarote a las 22:23 horas (local) y en el trayecto tardó unos 40 minutos.
Haidar, que había llegado al aeropuerto en una ambulancia desde el Hospital General de Lanzarote, donde estaba ingresada, abandonará el ayuno cuando llegue a su casa del Sáhara Occidental, ya que éste era el motivo de su protesta tras se expulsada el pasado 14 de noviembre por Marruecos.
Antes de abandonar el hospital, la activista saharaui ha dicho a los periodistas que lo primero que hará cuando llegue a El Aaiún será abrazar a sus hijos y a su madre y que su caso es “la victoria” del derecho internacional, los derechos humanos y la causa saharaui.
Aminatou Haidar se encuentra en huelga de hambre desde hace 32 días como protesta para poder regresar a la capital del Sáhara Occidental después de haber sido expulsada el 14 de noviembre por las autoridades marroquíes tras recibir un premio de derechos humanos en Estados Unidos.
Regresa a El Aaiún con el salvoconducto que llevaba el 4 de diciembre
Haidar regresó a El Aaiún con el salvoconducto que le fue expedido el 4 de diciembre, cuando intento sin éxito viajar a la capital del Sáhara Occidental, informaron fuentes del ministerio de Asuntos Exteriores.
Este salvoconducto permitió a Haidar viajar a El Aaiún a falta del pasaporte que Marruecos le confiscó el pasado 14 de noviembre antes de expulsarla a Lanzarote.
Las autoridades españolas expidieron este salvoconducto con el fin de que la activista saharaui pudiera volar dotada de un documento con el que poder llegar a el Aaiún.