SAN PETERSBURGO, 17 (Reuters/EP)
El presidente ruso, Dimitri Medvedev, ha advertido este viernes de que Rusia podría enfrentarse a un período de estancamiento económico si el país no emprende un proceso de modernización.
“Nuestra celebrada estabilidad puede esconder un período de estancamiento”, ha explicado Medvedev en el Foro Económico Internacional de San Petersburgo, el equivalente ruso al Foro de Davos.
“Las empresas controladas por el Estado han comenzado a predominar en un gran número de sectores, lo que ha desembocado en una baja actividad empresarial y unas escasas inversiones”, ha sostenido Medvedev, según ha informado la agencia rusa RIA Novosti.
Además, Medvedev ha pedido al Gobierno que revise sus “modestos” planes de privatización para el 1 de agosto, lo que supone una crítica implícita contra el primer ministro y su antecesor en el cargo, Vladimir Putin.
El control que ejercen las empresas estatales en la economía rusa es peligroso, ya que, ha señalado, muchos altos cargos del Estado también forman parte de los consejos de dirección de estas mismas compañías. Por ello, Medvedev les ha conminado a abandonar sus cargos en entidades privadas en otoño.
El presidente ha subrayado que un excesiva presencia estatal en la economía, además de abonar los casos de “corrupción”, puede significar “la pérdida de la competitividad de la economía rusa en general” y “un peligro para el futuro del país”. “El potencial de ese camino ya está agotado”, ha apostillado.
Sin embargo, ha matizado que este fomento de la inversión privada y el recorte de la influencia estatal en la economía no conlleva “el impulso de un capitalismo de Estado”. Medvedev ha calificado este proceso de “necesario” y ha insistido en que su finalidad es “poner orden en la economía”.
NO HABRÁ TÁNDEM
La llegada de Medvedev al Kremlin ha desencadenado varios cambios en la vertebración de las políticas rusas, especialmente, en el ámbito económico, estableciendo un punto de inflexión respecto a su 'mentor'.
“Mi elección es otra”, ha continuado, “la economía rusa debe estar dominada por la iniciativa y la inversión privada” y, por ende, “el Estado debería proteger la propiedad y a aquellos que deciden poner en riesgo de forma consciente su dinero y reputación.
A colación de estas críticas y divergencias con Putin, un consejero económico del Kremlin, Arkadi Dvorkovich, ha dejado entrever que Medvedev desvelará en otoño si se presentará a las elecciones presidenciales de marzo de 2012.
“Si no ocurre nada fuera de lo normal, no deberíamos esperar esta confirmación antes de otoño”, cuando, según “las reglas”, este anuncio “puede realizarse”.
No obstante, a pesar de que Putin ocupa actualmente el puesto de primer ministro, sí está considerado como el dirigente político más importante de Rusia. En este contexto, en el que presidente ruso pretende continuar en su cargo y ninguno de los dos se pronuncian sobre las elecciones presidenciales de 2012, ha surgido la hipótesis de que Putin y Medvedev formen un tándem que se alternaría en el poder.
Ante esta posibilidad, el presidente ruso ha asegurado que si esta propuesta “es impulsada por el Kremlin”, ello podría significar que el sistema es “insostenible” y “debe ser reformado”, puesto que “el sistema debe estar vertebrado en torno a una sola persona”.
Mediante estas declaraciones, Medvedev ha parecido descartar el tándem y acentúa el 'sprint' final político que han iniciado el presidente y el primer ministro ruso en las últimas semanas, en las que han predominado los cruces de declaraciones y los discursos con claros carices electoralistas.
Al respecto, Dvorkovich se ha apresurado a matizar que ,la campaña electoral aún no ha comenzado y que dichas proclamas son meramente “políticas”.