La empresa agrícola Bonny, que había colonizado una parte importante del paraje denominado La Lomada, próximo a la villa de San Sebastián de La Gomera, decidió en 1978 la construcción de una pista de vuelo en las proximidades de Roque Placeres, que entró en servicio en ese mismo año para el uso de avionetas dedicadas a la fumigación.
La pista medía 800 x 14 metros y su construcción fue adjudicada al contratista local Indalecio Darias. Inicialmente fue utilizada por un helicóptero que llegó a la isla desmontado a bordo del ferry “Benchijigua” y luego por avionetas especializadas. En 1989 cesó toda actividad y quedó abandonada, aunque su trazado era posible apreciarlo hasta no hace mucho tiempo.
La explotación agrícola dedicada al cultivo de tomates ocupaba una superficie de 32,5 hectáreas y en 1964 se inició su primera zafra. Bonny fue uno de los promotores agrícolas más importantes de La Gomera. En pleno apogeo llegó a tener una plantilla de 318 personas dedicadas a los cultivos de tomates en La Lomada y empaquetados situados en Chejelipes, además de la prospección de un pozo para el suministro de agua potable, que en la actualidad abastece a la villa capital.