¡Con la burocracia hemos topado!

Si quieres acceder a una formación universitaria y no dispones de los medios económicos necesarios, querido joven palmero, difícil lo tienes. Así es la realidad, hoy en día, en la Isla de La Palma.

Nuestras autoridades públicas, en época de bonanza, no se preocuparon lo suficiente para que los jóvenes palmeros puedan labrarse un futuro digno mediante el acceso a una preparación universitaria. Nuestra Isla, no es tan “afortunada”, como ocurre con el caso de Lanzarote o Fuerteventura, en las que ya se imparten determinadas disciplinas universitaria y, nuestros políticos, dicho sea de paso, no les tienen tanta estima, pues les obligan a dejar atrás su tierra y sumir a vuestros padres en una incertidumbre económica. A ellos les toca, entonces, sufragar los gastos correspondientes a residencia, alimentación, desplazamiento y material de estudio, por no nombrar muchos otros que, aunque menores, es preciso tener en cuenta.

Pese a esta situación, nuestros políticos siguen de brazos cruzados o, simplemente, se hacen los suecos. Cierran los ojos ante una realidad más que palpable en otras islas, en las que sí se puede disfrutar de una formación presencial. Perdidas quedaron esas “falsas ilusiones” que tuvieron como punto de partida el anuncio por parte del Cabildo, hace ya unos buenos años, de la firma de un convenio de colaboración con la Universidad de Las Palmas para implantar alguna que otra disciplina universitaria en nuestra isla. Tuvimos que aceptar que el Rector de la Universidad grancanaria no fuera “muy partidario de colaborar” ya que, por eso a lo que llaman “ámbito de actuación provincial”, según dicen, debemos respetar la prioridad de la Universidad de La Laguna. Bla, bla, bla... ¡Con la burocracia hemos topado!

Por lo pronto, papás palmeros, a seguir esperando que nuestra clase política termine “las conversaciones” que, dicho sea de paso, van para largo. Ahora siguen otros años más de espera, en los que se pretende negociar con la Universidad de La Laguna el que se pueda impartir alguna mínima materia más en nuestra isla que Enfermería. ¡No, si, encima, vamos a tener que dar hasta las gracias por ello!

Si quieres acceder a una formación universitaria y no dispones de los medios económicos necesarios, querido joven palmero, difícil lo tienes. Así es la realidad, hoy en día, en la Isla de La Palma.

Nuestras autoridades públicas, en época de bonanza, no se preocuparon lo suficiente para que los jóvenes palmeros puedan labrarse un futuro digno mediante el acceso a una preparación universitaria. Nuestra Isla, no es tan “afortunada”, como ocurre con el caso de Lanzarote o Fuerteventura, en las que ya se imparten determinadas disciplinas universitaria y, nuestros políticos, dicho sea de paso, no les tienen tanta estima, pues les obligan a dejar atrás su tierra y sumir a vuestros padres en una incertidumbre económica. A ellos les toca, entonces, sufragar los gastos correspondientes a residencia, alimentación, desplazamiento y material de estudio, por no nombrar muchos otros que, aunque menores, es preciso tener en cuenta.