El Ayuntamiento de El Paso ha concedido los títulos de Hija Adoptiva e Hijo Predilecto a María Solbeida Marante de Paz y Antonio Manuel Bermúdez Pérez, durante el acto institucional celebrado en la tarde de este jueves en la Casa de la Cultura Braulio Martín, en reconocimiento a la admirable dedicación que el matrimonio ha desempeñado en las últimas décadas en favor de la conservación de la artesanía de la seda, se informa en nota de prensa.
Familiares, amigos y autoridades han llenado el Auditorio para agasajar a los galardonados en una emotiva entrega de distinciones con la que el Consistorio pasense expresa el agradecimiento a su labor y empeño diario para que este importante legado pueda seguir transmitiéndose a futuras generaciones.
El alcalde de El Paso, Sergio Rodríguez, destacó en su discurso que “hoy homenajeamos a nuestra historia y saludamos con optimismo al porvenir. Y lo hacemos con dos personas cuya vocación y dedicación nos permite presumir de un patrimonio único en Europa. Desde la crianza del gusano, a la elaboración del hilo y el tejido, ese prodigio sencillo logrado con las técnicas medievales, es posible gracias a este matrimonio que hoy recibe una cuota de la inmensa gratitud que se merece”.
Tanto la portavoz de Coalición Canaria, Irinova Hernández, como el portavoz del Partido Popular, Ángel Tomás Hernández, así como el instructor Andrés Carmona, coincidieron en sus intervenciones en realzar la labor de Solbeida y Antonio en la defensa de las arraigadas tradiciones y costumbres del municipio, sumándose al agradecimiento que hoy la Ciudad brinda a ambos artesanos.
Tal y como se destaca en la moción, en los últimos años se han dado importantes pasos para garantizar la pervivencia de esta artesanía, como la apertura del Museo de la Seda, con el taller en vivo gestionado por ‘Las Hilanderas’, la declaración de Bien de Interés de Canarias en 2014 o el hecho de formar parte del sello de moda insular ‘Isla Bonita Moda’, que ha propiciado el poder estar en una de las más importantes pasarelas con un vestido de la diseñadora Ágatha Ruiz de la Prada.
Discurso del alcalde, Sergio Rodríguez:
Dignísimas autoridades, compañeros de corporación, señoras y señores:
Cuando tenemos a nuestro alcance una labor meritoria y delicada, cuyos orígenes entroncan con las civilizaciones más cultas y sensibles que habitaron el planeta; cuando esa actividad refinada tiene tanta antigüedad como nuestra historia occidental; cuando contemplamos las exquisiteces que, día a día, salen del Taller de Las Hilanderas tenemos que sentirnos orgullosos de ser y vivir en El Paso.
Hoy es un gran día para nuestra Ciudad y para la corporación que presido; para todos y cada uno de los pasenses que compartimos memorias y sentimientos comunes; para quienes pensamos que, sin la tradición, no es posible tejer – ese es el verbo indicado – el futuro próspero que todos los hombres y los pueblos de bien merecen.
Así pues, hoy homenajeamos a nuestra historia y saludamos con optimismo al porvenir. Y lo hacemos con dos personas cuya vocación y dedicación nos permite presumir de un patrimonio único en Europa. Desde la crianza del gusano, a la elaboración del hilo y el tejido, ese prodigio sencillo logrado con las técnicas medievales, es posible gracias a este matrimonio que hoy recibe una cuota de la inmensa gratitud que se merece.
Antonio Manuel Bermúdez Pérez es el cuarto hermano de una saga artesana donde se cuentan nombres que están en la mitología de las manufacturas; su abuela Maruca González, matriarca de la saga; su madre Zenobia Pérez… Familiarizado con todas las fases del proceso productivo, ha pasado la mayor parte de su vida en el telar y, desde niño, cruzó la cumbre para vender las labores en la banda oriental.
Nacida en Mazo, María Solbeida Marante de Paz, procede también de una familia artesana; su padre y abuelo fueron toneleros y fabricaron aperos campesinos; las mujeres de su casa practicaron las labores del tejido, de lana, lino, seda y residían por temporadas en El Paso. Casados en 1979, su hija, Begoña Bermúdez Marante, asegura la continuidad de unas técnicas perfeccionadas con la experiencia y de unas labores con sólida reputación internacional por medio del Museo y Taller Las Hilanderas, abierto desde el año 2001, en el corazón de nuestro casco urbano y una referencia incuestionable de jerarquía y prestigio manufacturero.
Quien trabaja con las manos es un operario manual; quien emplea sus manos y su cabeza, es un artesano; quien trabaja con sus manos, cabeza y corazón es un artista, con toda la grandeza que implica el término. Reconocemos en Antonio y Solbeida a unos vecinos admirables, responsables desde su parcela de la justa fama de El Paso y, también, a dos artistas por los que sentimos el más legítimo orgullo y el más sincero afecto.
Gracias de corazón.