El fuego obliga a desalojar a 160 personas en La Palma

El Cabildo de La Palma ha informado que ya son cuatro los helicópteros que trabajan en todo el perímetro del incendio, que ha obligado a desalojar a unas 160 personas y sigue sin estar controlado, afectando ya a una superficie de 400 hectáreas.

Los desalojados proceden de las localidades de La Juliana, Piedra Blanca, Moradita y Tacande; la mayor parte fueron realojadas en la antigua Fábrica de Tabaco.

Las autoridades insulares informan que los trabajos se centran ahora en la protección de las viviendas con la intervención del personal del Cuerpo de Bomberos Voluntarios: “Se ha pretendido que el fuego no pase de la zona de viviendas, protegiendo las mismas y acotando el fuego en la zona Sur del incendio”.

Más de 250 personas se incorporarán en el turno de mañana, que estarán apoyados por una treintena de vehículos. Además, a los helicópteros que operaron durante la jornada del lunes, del Gobierno de Canarias y del Cabildo de Gran Canaria, se incorporan los dos helicópteros de la BRIF, con base en la isla.

El Puesto Médico Avanzado instalado en El Paso por la Cruz Roja ha atendido durante la noche a 27 personas, generando cuatro derivaciones, en su gran mayoría afectadas por intoxicación con humo, sin que al parecer revistan gravedad.

Intoxicaciones

El Puesto Médico Avanzado instalado en El Paso por la Cruz Roja ha atendido durante la noche a 27 personas, generando cuatro derivaciones, en su gran mayoría afectadas por intoxicación con humo, sin que al parecer revistan gravedad.

Además, cuatro carreteras permanecen cortadas: LP-301del Refugio del Pilar a San Isidro (entre los puntos kilométricos 7 y 21), LP- 212 de Tacande a las Manchas (desde su inicio al kilómetro 5.700), LP-214 Acceso a La Caldera de Taburiente (desde el kilómetro 0 al al 14.500) y LP-2 cruce de Tajuya a Todoque (desde el kilómetro 40,800 al 44,500). Como vías alternativas a este último corte, Guardia Civil recomienda circular por alas carreteras LP-211 y 213.

Se pide a la ciudadanía que se abstenga de circular por las zonas afectadas y de trabajo de los medios de extinción.