En el programa de actos de los festejos 2018 se justifica y documenta estos actos con el siguiente texto:
“A Méjico arribaron en busca del sueño anhelado, cinco años y una fortuna, familias de La Laguna, antes Tajuya de Abajo, del municipio de Los Llanos de Aridane de la isla canaria de La Palma.
Allí formaron empresas de distintos ramos de la industria, el comercio y la agricultura. Aún perdura en la ciudad de Tampico el edificio los hermanos Brito que fue dedicado al banco Brito Banking, entre otras empresas dedicadas a la extracción de petróleo, ranchos ganaderos, distribución de la cervecera Moctezuma, etc.
En nuestra opinión, este fenómeno es digno de resaltar en una población de un barrio o pago que no superaba los 500 habitantes en torno a 1910. La repercusión de la crisis de la primera guerra europea obligó a mirar hacia el horizonte de la orilla del océano Atlántico. Frente de las tierras baldías de La Laguna estaba América, estaba Méjico.
En 1915 ya se encontraban en Tampico los hermanos laguneros Brito Simón. Las buenas noticias de prosperidad propiciaron ‘la llamada y reclamo’ de otras familias laguneras con los apellidos: Brito Lorenzo, Brito Paíz, Cruz Cruz, González Jiménez, González Rodríguez, Hernández Brito, Hernández Capote, Leal Jiménez, Rodríguez Brito, Rodríguez Jiménez, Simón Capote. Otras personas fueron a título individual.
Unos volvieron y otros echaron raíces en la tierra de acogida. Esta edición de los festejos mayores de La Laguna será recordada, por generaciones venideras, por ser el del reencuentro con Méjico y los lazos de unión que aún siguen manteniendo con esas familias laguneras de emigrantes que hoy buscan con cariño sus raíces“.