La portada de mañana
Acceder
La declaración de Aldama: “el nexo” del caso Ábalos apunta más arriba aún sin pruebas
De despacho a habitaciones por 1.100 euros: los ‘coliving’ se escapan de la regulación
Opinión - ¿Misiles para qué? Por José Enrique de Ayala

El ejercicio físico en tiempos de pandemia

Santiago Jorge (i) y  Javier Cano.

0

Que el ser humano es contradictorio no es una noticia nueva; nos preocupamos por la salud cuando estamos enfermos, tenemos que pasar por una pandemia para entender que la salud es lo primero; no practicamos una actitud preventiva contra la enfermedad, no nos educan para la salud, a veces pensamos que somos indestructibles y solemos presumir de que vivimos en la sociedad del bienestar; la realidad es otra bien distinta, nos alimentamos de forma poco sana, la obesidad sigue aumentando, las células se nos desmadran con facilidad, el aire y la vida cada vez son más tóxicos. Todo esto mezclado nos da un cóctel realmente explosivo.

Recurro a Javier Cano (gestor cultural, técnico y gestor deportivo de Dinámica Eventos y Gimnasio Nandomao en Santa Cruz de La Palma) para que nos aporte un punto de luz y motivación y poder valorar el ejercicio físico como una filosofía de vida, poder crear entre todos una sociedad más sana y por lo tanto más feliz.

Sin más rodeos, le pregunto por los beneficios del ejercicio físico en la infancia, la juventud y la tercera edad; tres sectores poblacionales muy sensibles y que tenemos la obligación de cuidar y proteger.

La infancia: Los videojuegos, la televisión e internet están creando unos hábitos de vida sedentarios, que se reflejan directamente en la salud de los niño/as, pierden movilidad, aumentan la obesidad, generan apatía y falta de motivación. Las sugerencias que nos argumenta Javier son: juegos o circuitos de coordinación, ejercicios pliométricos; disfrutar de la parte lúdica del deporte y el ejercicio, la posibilidad de compartir y socializar con los demás, aprender a competir de forma sana, saber ganar y saber perder, desarrollar el concepto espacial, ayudar al crecimiento, educar en salud. Un niño/a que hace ejercicio físico será un adulto sano y motivado. 

La juventud: Nadie niega hoy en día que la juventud está muy desorientada y posiblemente asustada por todo lo que está pasando y la incertidumbre en cuanto al futuro más próximo. El potencial preventivo que tiene el ejercicio físico en la juventud es un diamante en bruto que no lo podemos menospreciar. Me comenta Javier, que un joven que haga deporte o asista a un gimnasio no tiene interés en elementos tóxicos o hábitos dañinos, su propio cuerpo lo rechaza. Es el sueño dorado de todo padre para sus hijos adolescentes. Con el ejercicio se sienten bien, les sube la autoestima, conocen su cuerpo, y aprecian la estética corporal, lo disfrutan y lo comparten. 

La tercera edad: Nuestros mayores tienen todo el derecho del mundo a disfrutar de una vejez sana y activa, no podemos olvidar que gracias a ellos estamos aquí. Los beneficios del ejercicio físico en la tercera edad son muchos y variados que me enumera: fortalecen las articulaciones, ayuda a mejorar la movilidad, trabajan de forma personalizada el movimiento del tronco, cadera, piernas, hombros. Ayuda a reducir los temblores y enfermedades motoras, les genera bienestar, socializan, aumenta el sistema inmunológico, les sube la autoestima, mejora la calidad del sueño y se sienten más motivados. No hay edad para el ejercicio físico. 

Santiago Jorge (pintor-coach artístico)

 

Correo: santiago62jorge@gmail.com

Teléfono: 674949853

Etiquetas
stats