El presunto asesino de Laura es recibido con insultos en los juzgados de la capital

Momentos de mucha tensión y rabia. El dolor se ha desbordado este miércoles en la Calle Pérez de Brito de Santa Cruz de La Palma. Numerosas personas se han congregado en las cercanías de los Juzgados de la capital para abuchear e insultar al presunto asesino de la joven Laura González, David Batista, que ha llegado al edificio judicial con una gorra blanca y las dos piernas vendadas sobre las 10.00 horas y se ha negado a declarar.

Durante el tiempo que ha permanecido en el interior de las dependencias, justo dos horas, los padres de Laura, Lourdes Lorenzo y Elías González, junto a otros familiares y amigos, han gritado “asesino, asesino, maltratador” y otros insultos que han puesto de manifiesto el hondo dolor que ha causado la muerte de la joven, fallecida el pasado 10 de julio a consecuencias de las numerosas quemaduras que sufrió en su cuerpo al ser rociada con un líquido inflamable.

La acusación particular, representada por Milagros Fuentes, decana del Colegio de Abogados de Santa Cruz de La Palma, pide para David Batista prisión preventiva sin fianza y una pena de entre 15 y 25 años de prisión por un delito de asesinato.

El presunto asesino abandonó el edificio judicial sobre las doce del mediodía, esposado, cabizbajo, con una gorra blanca, bermudas y zapatillas de playa. Las dos piernas las tiene vendadas.

David Batista viajó ayer de Sevilla hasta Santa Cruz de Tenerife y esta mañana, a primera hora, ha viajado a La Palma para la toma de declaración, que finalmente no se ha producido. Está previsto que esta misma jornada abandone la Isla.

En el dispositivo de seguridad participaron agentes de la Policía Nacional, de la Policía Local y de la Guardia Civil.