TOLEDO, 20 (EUROPA PRESS)
La presidenta electa de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, ha prometido este lunes que su Gobierno reducirá las Direcciones Generales de 52 a 30, que dejará un delegado de la Junta por provincia (pasando así de los 35 actuales a 5) y que suprimirá el 50 por ciento de los puestos de libre designación, lo que supondrá --dato que no ha concretado en su intervención y del que ha informado el PP-- reducir el número de altos cargos del Ejecutivo castellano-manchego en un 60 por ciento.
Dentro de su programa de Gobierno también suprimirá algunos organismos autónomos, como el Defensor del Pueblo, la Comisión Regional de la Competencia y el Consejo Económico y Social, tal y como anunció hace unos meses y ha reiterado en su intervención en la primera jornada del Debate de Investidura que se celebra en las Cortes durante dos días.
En un discurso de una hora en el que ha desgranado las que serán las líneas esenciales de su Gobierno, la presidenta electa ha reiterado su intención de privatizar la Radio Televisión de Castilla-La Mancha.
Así, ha explicado que saneará las cuentas públicas a través de una “tajante” reducción del gasto corriente y de “una contundente” racionalización del sector público, y ha precisado que cuando habla en estos términos se refiere a una “auténtica reforma” del gasto y no a un “recorte cosmético” del mismo.
Cospedal ha avanzado que su Ejecutivo operará bajo un techo de gasto y endeudamiento que fijarán anualmente las Cortes de Castilla-La Mancha, y que la gestión del presupuesto regional será fiscalizada por una oficina de control presupuestario, dependiente de la Presidencia del Gobierno.
Cuando el PP acceda al Gobierno de la Junta, verificará la situación de Tesorería en el momento del cambio de Gobierno, comprobará la realidad de estimación de los ingresos del presupuesto, analizará el grado de cobertura presupuestaria de las obligaciones previstas en 2011 y realizará un mapa del entramado de organismos, empresas con participación pública, fundaciones, consorcios y otros.
La presidenta electa ha anunciado su intención de “contener inicialmente” el desarrollo de las infraestructuras de la región, que “comenzarán” una vez que se saneen la cuentas públicas.
Además, según ha dicho, “Castilla-La Mancha necesita que España deje atrás el calvario al que está sometida por un Gobierno de la nación que no está a la altura de las circunstancias”, por lo que ha solicitado la celebración inmediata de la Conferencia de Presidentes y del Consejo de Política Fiscal y Financiera para que “se despejen las dudas” respecto al cumplimiento del modelo de financiación autonómica.
Cospedal también ha recordado su compromiso de reformar el marco normativo para garantizar la independencia de las entidades financieras de la región --no ha habido alusión en este punto a la desaparecida CCM-- y para favorecer una mayor implicación del conjunto de bancos y cajas en el desarrollo económico y social de la región.
LUCHA SIN CUARTEL CONTRA EL PARO
No obstante, ha avanzado que la primera decisión que adoptará como responsable autonómica será la de “librar una lucha sin cuartel contra el paro masivo y la rampante precariedad laboral”, teniendo en cuenta que en la región hay “cientos de miles de ciudadanos golpeados por la crisis”.
Así, los tres grandes objetivos de su política económica serán “la creación de empleo, la creación de empleo y la creación de empleo”, ha manifestado, convencida de que esta “lucha” contra el desempleo “va a ser larga pero la vamos a ganar”, porque este combate contra el paro “es la meta irrenunciable” de su Gobierno.
En este contexto, se ha comprometido a aprobar en el primer periodo de sesiones una ley para el fomento y consolidación del trabajo autónomo y de las pymes, basada en la eliminación de trabas burocráticas y la aplicación de incentivos fiscales y sociales para el fomento del autoempleo y la creación de empleo.
ELEGIR MÉDICO Y HOSPITAL
La presidenta electa también se ha comprometido a que los ciudadanos puedan elegir libremente médico y hospital, y ha dicho que analizará el estado de ejecución de los hospitales de Cuenca y Toledo.
“Antes del mes de agosto” se reunirá con las entidades más representativas de colectivos relacionados con la discapacidad, a fin de “arbitrar fórmulas” que garanticen sus completa integración, y ha avanzado que todas las políticas de mujer, con independencia del carácter transversal que tendrá esta materia, dependerán de la Presidencia de la Junta de Castilla-La Mancha.
EDUCACIÓN, SANIDAD Y SERVICIOS SOCIALES
En materia educativa ha prometido una ley de calidad educativa que contendrá un plan de choque contra el fracaso escolar, la enseñanza bilingüe en todos los niveles educativos, el reconocimiento del profesor como autoridad pública en las aulas y el impulso a la carrera docente. El texto lo elaborará mediante un proceso de diálogo que ha se comprometido a iniciar con la comunidad educativa.
María Dolores de Cospedal hará también una ley de museos y actualizará la ley de patrimonio histórico, y dará un impulso a la Red de Parques Arqueológicos Nacionales. Igualmente, ha dado su apoyo a los actos del IV centenario de la muerte de El Greco. Propondrá que la fiesta de los toros sea declarada como Bien de Interés Cultural.
Como ha advertido, la educación, al igual que la sanidad y el bienestar social, serán servicios públicos, universales, gratuitos y de calidad.
En relación con el agua, las únicas palabras de Cospedal han sido para ratificar su apuesta por un Plan Hidrológico Nacional que “garantice agua para Castilla-La Mancha y para toda España”.
TODOS SOMOS IMPRESCINDIBLES
María Dolores de Cospedal ha iniciado su discurso recordando a los heridos en Afganistán --uno de ellos de Talavera de la Reina (Toledo)-- y ha prometido que su primer acto institucional como presidenta regional será reunirse con las familias de los once fallecidos en el incendio de Guadalajara y entregarles un reconocimiento por el sacrificio realizado.
Sus últimas palabras han sido para mostrar su “plena disposición al diálogo y al entendimiento” y “a la búsqueda de acuerdos y el consenso con todas las formaciones políticas y organizaciones sociales”. Su intención, ha dicho, es la de enarbolar la bandera de la lealtad institucional porque “todos somos imprescindibles”.