El voto en blanco, el sobre introducido en la urna sin ninguna papeleta en su interior, se ha duplicado en Canarias en estas elecciones respecto a los comicios europeos de 2004 y se convierte en la quinta opción política de los canarios.
Escrutado el 98,95 por ciento de los sufragios, se habían contabilizado 7.802 votos en blanco, el 1,31 por ciento del total.
Hace cinco años, esta opción sólo fue elegida por el 0,50 por ciento de los votantes.
La denominada “abstención activa” se sitúa así por detrás del PP, el PSOE, Coalición Canaria, Izquierda Unida de Canarias y por delante de UPyD y Los Verdes.